La regularidad afianza a Alonso en el liderato
El asturiano se marcha de vacaciones mandando en el Mundial de Fórmula 1.
Regularidad. Esa es la clave. Los neumáticos Pirelli y la prohibición de los difusores soplados que permitieron volar a los Red Bull en 2011 han convertido cada carrera en una auténtica ruleta. Pocos son los que se atreven a situar a un monoplaza por encima del otro, si bien algunas diferencias se van notando conforme avanza el campeonato.
Ferrari ha conseguido solventar los problemas de principio de temporada, aunque aún sufren en circuitos revirados y en condiciones de mucho calor, como dejaron patente este fin de semana en el Hungaroring.
Más allá de los coches rojos, los Red Bull cuentan con el monoplaza más potente, y McLaren con el más completo en según qué situaciones. Lotus se ha metido en medio de esta lucha a tres, y también cuenta para muchas quinielas, donde de vez en cuando se pueden colar ‘outsiders’ como Mercedes, Williams o Sauber.
Sin embargo, más allá de las capacidades técnicas de cada monoplaza, Alonso ha conseguido unos números impensables en Australia y que, repasándolos, dan prueba de hasta qué punto el español ha alcanzado el nivel óptimo para conseguir el ansiado tricampeonato.
El asturiano es el piloto que más veces ha estado en el cajón esta temporada, seis, una más que Hamilton y Raikkönen, o el doble que Vettel, Button o Grosjean. También es el mejor en número de victorias, o en puntos.
En definitiva, Alonso puede estar satisfecho de su labor en esta primera parte de la temporada. Ha sido, sin discusión, el mejor de los once grandes premios disputados.