España consigue una sufrida victoria y se mete en la lucha por las semifinales

La selección española de hockey hierba ha sumado una sufrida victoria ante Sudáfrica (2-3) en la tercera jornada de los Juegos Olímpicos de Londres, que le permite seguir luchando por alcanzar un puesto en las semifinales, en un encuentro que pasó del dominio español en los primeros minutos a acabar pidiendo la hora al final.

España afrontaba el choque sin margen de error, después de empatar en el primer partido con Pakistán y perder el segundo con la campeona del mundo Australia. Por si fuera poco también tenían que hacer frente a las bajas de dos de los mejores jugadores del combinado nacional, Santi Freixa y Pol Amat.

De igual forma, los chicos de Dani Martín salieron a por el partido y comenzaron dominando la bola, pero no había oportunidades claras de gol salvo un robo de Ramón Alegre que dio el pase atrás para Edi Tubau pero que se va fuera rozando el poste (min.13). Y así, transcurridos 20 minutos, llegó el primer 'penalti-córner' para España que sacó la zaga africana (min.23), y que prolongaba la mala racha con los penaltis.

Dos minutos más tarde, otro 'penalti-córner' pero esta vez para los sudafricanos que con una serie de rebotes conseguía el gol y ponía el marcador y la clasificación muy cuesta arriba. En cambio, lejos de achantarse, el equipo español buscó el gol y no tardó en encontrarlo, ya que minutos más tarde, por medio de un 'penalti-córner' Marc Salles pinchó el disparo de Pau Quemada y los españoles que empataban (min.30).

España llegaba con más claridad al área sudafricana, sin embargo nada hizo que el marcador cambiara antes del intermedio. En la reanudación España siguió dominando y un 'penalti-córner' cambió radicalmente el partido. Pau Quemada transformó y Sudáfrica, eliminada de los Juegos, buscó desesperadamente el gol que pudiera meterlos otra vez en el encuentro y en Londres.

El gol llegó, pero del lado español, que a través de Miki Delas abrió brecha en el marcador. Pero la insistencia de los africanos dio sus frutos cuando a 8 para el final en una jugada colectiva consiguieron acercarse en el electrónico. España resistía como podía y Sudáfrica lo intentaba, pero el combinado de Dani Martín aguantó y se metió en la lucha por las semifinales y en el sueño de las medallas.