Al Ademar le espera un infierno

El Ademar no se encontrará hoy enfrente al mejor jugador del mundo, Nikola Karabatic, excluido del partido de Liga de Campeones junto a otros cuatro compañeros por la supuesta vinculación de todos ellos con una trama de apuestas ilegales en un partido de la liga francesa de la pasada campaña. Pero sí tendrá que vérselas con un ambiente hostil en un Arena Montpellier que va ser una caldera a presión durante el encuentro que esta tarde (19.00) disputará el equipo leonés. Van a ser sin duda sesenta minutos muy largos para el técnico Manolo Cadenas y sus hombres porque el club galo y su afición afrontan este partido con los ánimos encendidos después de que la justicia francesa imputase a cinco de sus jugadores en una red de apuestas ilegales: los hermanos Nikola y Luka Karabatic, el pivote Tej, el letal extremo esloveno Gajic y el portero Prost. Cinco bajas que forman la columna vertebral del equipo y a los que hay que añadir otras tres ausencias por lesión: Guigou, Kavticnik y el español Malmagro.

En estos momentos el Montpellier es un equipo roto por las bajas y con su autoestima seriamente dañada por el escándalo. Pero lejos de arrodillarse el club y a la afición ha reaccinado con un arreón de orgullo que se manifestará hoy con toda su intensidad. Bajo el lema «Todos con el Montpellier», el club galo y su afición quieren convertir el partido en toda una batalla para reivindicar su imagen. La ciudad entera está movilizada incluidos los clubes de fútbol, rugby y polo que también se agrupan bajo el entramado deportivo de Montpellier.

Incluso se han abaratado los precios habituales para que el pabellón registre un lleno absoluto. «Queremos enviar un mensaje fuerte y claro de que el club es la principal víctima de esta situción», advierte su hinchada a través de las redes sociales.

Así las cosas, el objetivo del Ademar de pescar en río revuelto se complica y mucho porque sin duda ese ambiente influirá en el arbitraje. Bien es cierto que el Montpellier, acuciado por sus ocho bajas, se verá obligado a echar mano de jugadores juveniles y eso incrementa las opciones del Ademar pero, pese a estar en cuadro, podrá poner en pista un siete inicial poderoso.