LUCHA LEONESA. LXIX CAMPEONATO PROVINCIAL
...Y quince cintos de el Divino
El Provincial de Lucha proclama campeonas a Patricia Ibán, Miriam Marcos y Mónica Matía y campeones a los cuatro vencedores de la Liga de la Regularidad.
Héctor miró a lo alto y señaló después la dedicatoria del campeonato hacia quienes no le han fallado en lo menos feliz.
Dos de los destacados juveniles de la mañana iniciaban los combates de sénior: Daniel Pinto y Unai del Campo. El grupo de participantes en el primer peso, grande (21) y de calidad. Se esperaba que pudiera ser revancha o reválida de la muy disputada liga. Quien venció en ella, se llevó también el Provincial: Ibán Sánchez. Tremenda la condición en la que se mostró el de Barrillos. Dos de sus máximos rivales, Víctor Llamazares y Moisés Vega se enfrentaban en cuartos. Se impuso Moisés, a quien le ganaría su semifinal Javier Oblanca, con protesta por alguna decisión arbitral. Logró tercer puesto Moisés ante otro de los destacados en el corro, Yúliver Álvarez, y la final se la ganaba (entera, media y entera) Ibán a Javier.
Medios esperaba a Héctor, a su reto consigo mismo. No falló «El Divino» de Campohermoso. Entre los quince de ese peso, juveniles de garra como Joel Jiménez y veteranos irreductibles como Mariano Sánchez. Y Samuel Pérez, que volvía a los menos de 88. Y Samuel en la final ante Héctor, después de que Marquiegui le ganara el tercero a Guillermo Rodríguez. Una entera en seis segundos, una dedilla de academia y la hebilla número quince, hacia lo alto.
Doce los de semipesados, y la atención con foco en Clemente Fuertes. «El Junco» podía lograr su décimo Provincial; y lo logró. No fue fácil, y fue discutida su lucha con Roberto Rodríguez Bulnes en cuartos. Guillermo González le ganó el tercero a Jonathan Álvarez y la final, dos enteras por una, para Clemente ante Jesús María Cabero.
Hasta «Benitín» el de Las Salas (que aguantó en el corro sus más de cuatro horas y media) echó de menos entre los de pesados a Carlos «Chiquito» Zegarra, retornado a Lima. Estuvo campeón por mérito «Caberín», a quien le peleó la final otro veterano de honro, «Morín», que lo intentó, pero no pudo acompañar con título a su hijo.