ULTRAFONDO. THE ANCIENT KHMER PATH
Otra muesca para Salva
El atleta cepedano sella su triunfo en Camboya a falta de la última etapa. Su ventaja sobre el segundo supera la hora.
Gran Muralla China, Annapurna, Cañón del Colorado... y ahora Camboya. Salva Calvo, el ultratleta cepedano, certificó ayer su triunfo en una de las pruebas más exigentes y de prestigio en el calendario internacional, The Ancient Khmer Path, con un dominio abrumador sellado en las victorias parciales de etapa y una renta de una hora y diez minutos sobre el segundo clasificado.
A falta de la última jornada de 16 kilómetros, intrascendente para la clasificación, y una vez que la quinta etapa era anulada por los organizadores debido al extremo calor, Calvo acumula un tiempo de 16 horas 36 minutos y 35 segundos por las 17 horas 45 minutos y 48 segundos del otro español en la carrera asiática, Manuel Pastor. A más de tres horas cierra el podio el canadiense Paul Trebilcock que se aprovechaba del desfallecimiento del suizo Daniel Meyes en la cuarta etapa para arrebatarle el bronce.
Eso sí, ninguno de ellos ha inquietado Salva que ya en la primera etapa de 35 kilómetros imponía su ritmo para presentarse en la línea de meta con ocho minutos de ventaja sobre el segundo y 16 respecto al tercero. No obstante aún no había llegado lo duro donde el leonés se muestra más consistente.
Ventaja creciente
En la segunda etapa con selva y bosque como escenarios Salva completaba los 42 kilómetros hasta la puerta del templo de Preah Khan con un crono de 3h44:00. Pastor y Trebilcock le escoltaban aunque a más de diez minutos. Justo en la tercera etapa Salva daba el golpe de gracia a la prueba. Con 65 kilómetros por delante de este a oeste de Camboya lo variopinto y cambiante del terreno y el calor extremo le ayudaron a eliminar pronto a sus principales adversarios. Pastor, que hasta el momento parecía ser el único en seguirle a cierta distancia, pagaba los esfuerzos cruzando la meta de Prasat Boeng Mealea a 50 minutos de Salva, justo por detrás de Trebilcock que se dejaba con el de Brimeda 41 minutos.
Con una ventaja insalvable para el resto de atletas Calvo incluso se permitía el lujo de ceder dos segundos en la cuarta etapa, botín nimio para Pastor que hoy verá como en la líneas de meta de Angkor el leonés se proclama campeón, una muesca más para el mejor ultrafondista del mundo.