Campeón del mundo en solidaridad

El divismo y Vicente del Bosque son conceptos contrapuestos. Pese a que es el técnico que ha llevado a España a sus más altas cotas históricas, el técnico salmantino dio ayer en León otra lección de cercanía y de categoría humana. Al igual que ya hiciese el año pasado en la primera edición del Desafío Solidario, Del Bosque regresó al León Plaza para renovar su compromiso con esta iniciativa humanitaria que impulsa el ex juez de línea Rafa Guerrero con el propósito de recaudar fondos con destino a Cáritas. El Desafío, como ya es conocido, reúne en un partido de fútbol sala —el próximo ocho de diciembre— a los amigos de Rafa Guerrero y de David Bustamante. Este año estarán presentes exjugadores como Fernando Hierro, Luis Milla o Emilio Amavisca, junto a tenistas como Nico Almagro o el popular periodista José María García.

En un acto al que asistieron también el mencionado Rafa Guerrero, el concejal de Deportes, José María López Benito, y el presidente de la Deportiva Ponferradina y miembro de la junta directiva de la Federación Española de Fútbol, José Fernández Nieto, el seleccionador nacional apeló de inicio al buen corazón de la sociedad leonesa. «Estoy aquí para ayudar a esta causa. No sé si mi apoyo va a suponer mucho pero espero que la respuesta de todos los leoneses sea al máximo Espero que en el partido haya un lleno para que Cáritas pueda ayudar a todos los que los están pasando mal», manifestó.

Luego, como profundo hombre de fútbol que es, habló de muchos temas candentes y de la situación de algunos de los clubes de la comunidad. «Algunos como el Palencia están en una situación límite y el Salamanca también lo está pasando mal. Pero también hay cosas buenas, tenemos a un equipo en Ponferrada como es la Deportiva, que está a un punto de jugar la fase de ascenso a Primera. Ya le digo al presidente, aunque en broma, que va a jugar la próxima Champions».

Del Bosque reconoció también que sigue en el fútbol tras su etapa como jugador porque «no servía para otra cosa» y señaló que el margen de mejora de la Selección todavía es amplio. «Ahora tenemos nuevos retos como la fase de clasificación para el Mundial 2014 ante Finlandia y Francia y luego tenemos también la Copa de Confederaciones». Del Bosque concedió que para el Balón de Oro había votado a Casillas y Xavi para el Balón de Oro y no se quiso meter en ningón «fregado» hablando de Mourinho. «De eso no voy a contestar ni una palabra. No tengo ningún enemigo en el fútbol y no quiero buscármelos. Estamos en un momento extraordinario del fútbol español y no quiero empañarlo con ninguna discusión con nadie. Que cada uno opine lo que quiera», zanjó el técnico.