SEGUNDA DIVISIÓN. EL RIVAL
Un equipo fuera de sitio
Tras un buen inicio de la temporada, los resultados de los últimos dos meses han alejado al Real Murcia de los puestos de promoción de ascenso a Primera.
El Real Murcia es, junto con el Lugo, el único equipo que ha conseguido derrotar al Elche.
El Real Murcia llega hoy al Toralín, el campo donde logró su último ascenso a Primera División hace algo más de cinco años, en mayo de 2007. Como en aquella temporada, el equipo pimentonero quiere pelear en esta campaña por regresar a la máxima categoría, aunque de momento los resultados no están acompañando al equipo que dirige Gustavo Siviero.
Aunque la competición no había empezado mal para el equipo murciano, dos derrotas seguidas en las jornadas 11 y 12 ante Alcorcón y Girona, respectivamente, marcaron el inicio de una mala racha de resultados que les ha llevado a sumar sólo seis puntos en los últimos ocho partidos. La última victoria del Real Murcia esta temporada data del 17 de noviembre, cuando se impusieron por la mínima al Barcelona B en la Nueva Condomina. Desde entonces, dos empates ante Castilla y Sabadell y otras tantas derrotas frente a Almería y Guadalajara forman el bagaje del equipo de Siviero.
En todo este tiempo, las bajas han condicionado mucho al Real Murcia, que vio cómo perdía a su mejor jugador, Matilla, para seis partidos por insultar gravemente a un árbitro. También las lesiones se han cebado en el cuadro pimentonero, que sin embargo ya empieza a ver la luz y para esta jornada ha recuperado a cuatro jugadores a la vez, Molinero, Mauro, Saúl Berjón y Sutil. De ellos, los dos primeros formarán como titulares en la zaga que presentará el Real Murcia esta tarde en El Toralín para medirse a la Deportiva.
Por si los malos resultados en el campo fueran poco, la última semana ha estado revuelta en Murcia por asuntos extradeportivos. La salida nocturna de algunos jugadores ha venido a revolver aún más el panorama en un equipo que quiere retomar cuanto antes la senda de los triunfos para no descolgarse aún más de los puestos de cabeza.
Por eso, Gustavo Siviero ha preferido centrar su discurso de la previa en el partido, dejando de lado lo que pasa fuera del rectángulo de juego: «A veces no está bien agregar más de lo que ya se ha dicho o escrito. Es una situación que no hay que permitir que pase, pero también hay que tener en cuenta que, aunque se haya cometido un error, tiene que primar la salud del conjunto en sí».
Para el técnico argentino del Real Murcia, ganar en Ponferrada es «muy importante. Ellos tienen el ánimo por las nubes después de cinco victorias. Una derrota supondría una distancia considerable con el equipo que ahora mismo marca entrar en zona de playoff. Queremos recortarles para terminar el año de la mejor manera, pero es un compromiso complicado, muy difícil. Tenemos que ir a competir con todos los sentidos, porque si no lo vamos a pasar mal». Incluso hay quien ve en Ponferrada el último tren para aspirar al playoff, a pesar de que aún queda mucho por delante.
El equipo murciano, con Siviero a la cabeza, llegó ayer a Ponferrada para afrontar el último partido del año con el objetivo de despedir el 2012 con una sonrisa y aprovechar las vacaciones para olvidar los malos momentos por los que ha pasado el equipo en las últimas semanas.