Diario de León

«La actitud de ganarlo todo la tomé primero ante el cáncer y la transporté al ciclismo»

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

«La actitud de ganarlo todo la tomé primero ante el cáncer y la transporté al ciclismo. Y eso es malo, quise perpetuar la historia. Ganar era importante y aún me gusta, pero ahora veo el triunfo de otra manera. Doparse era parte del trabajo, así es como yo lo veía». Así de explícito se mostró Armstrong sobre la traslación que hizo de su lucha contra el cáncer que padeció a la faceta compettiva en la que sólo valía una palabra: ganar.

El texano reiteró que deseaba ganar a toda costa y sin importarle nada el precio que tendría que pagar. «El deseo de ganar a toda costa, el nivel al que llegó es un problema. La arrogancia y ser desafiante me perdieron», reconoció. «Hay personas en esta historia que eran buenas personas, no son monstruos, no son malvados y no son malos. Ferrari es un hombre inteligente, aún lo pienso», valoró Armstrong al referirse al doctor italiano Michele Ferrari, su gran colaborador.

A la pregunta concreta de si ¿dirías que Ferrari fue el líder y la mente maestra detrás del programa de dopaje?, Armstrong respondió con un «no» categórico. «Podrían pensar que soy un imbécil o un humanitario, yo diría que soy las dos cosas, pero no puedo hablar mal de Ferrari», argumentó. Sobre si se sentía mal por haber consumido sustancias prohibidas o si estaba haciendo algo malo con el dopaje, Armstrong respondió con dos «no».

Cuestionado por si obligó a sus compañeros de equipo a consumir productos prohibidos para correr a su lado, Armstrong respondió: «Rotundamente no, sé que no soy la persona más creíble del mundo ahora mismo, pero no hice eso».

Lance también admitió que el punto de inflexión fue cuando Floyd Landis se decidió a declarar. «Floyd me avisó que había confesado, que había grabado todo y que lo iba a colgar en youtube. Le dije que hiciera lo que tuviera que hacer. Pensé que la historia se sostendría por mucho tiempo, pero todo comenzó con la investigación federal. Cuando llamaron a declarar a George Hincapie lo supo: «Mi destino estaba sellado. «No culpo a George. Es la voz mas creíble en todo esto, conoce la historia mejor que nadie».

tracking