ATLETISMO. CAMPEONATO DE EUROPA
Aláiz brilla en una final rutilante
El leonés finaliza séptimo en los 3.000 metros en su debut en un Europeo tuteando a la élite internacional en una carrera en la que Higuero aplica su clase para sumar con la plata la presea número 100 de . España.
Higuero cruza exultante la meta por delante de Ólionáird.
Roberto Aláiz salió airoso de su reválida más exigente a nivel internacional con un séptimo puesto en la final de los 3.000 metros en la que el leonés, que en las series ya dejó constancia de su clase a pesar de llevar apenas dos meses en la categoría absoluta, se comportó como todo un veterano tuteando a la élite de una distancia en la que el discípulo de José Enrique Villacorta puede firmar muchas jornadas gloriosas para el atletismo español.
Aláiz era consciente de la dificultad que representaba medirse a gallos de la talla del azerbayano Ibrahimov, los franceses Carvalho y Kowal, el turco Akkas y el español Juan Carlos Higuero. Por ello su reto, una vez incluido en la nómina de los 12 mejores a nivel continental, era alcanzar un puesto entre los ocho primeros. Y dio en el clavo, incluso para mejor en una final que empezó a un ritmo elevado, circunstancia que a priori no favorecía los intereses del leonés.
El turco de origen keniano Polat Kemboi Arikan se encargó de marcar la pauta de la mano del gran favorito, el etíope nacionalizado azerbayano Hayle Ibrahimov, plata en el Europeo del 2011. Higuero se colocó a su estela, con el discípulo de Villacorta en el centro del grupo, escenario donde mejor se desenvuelve hasta que la carrera se lanza en la batalla por las medallas. El primer mil transcurrió en 2:39.35 y el segundo se pasó en 5:19.52. A cuatro vueltas del final pegó un tirón el francés Florian Carvalho, pero los dos españoles, Higuero y Aláiz, no se inmutaron. Eso sí, Roberto empezaba a ceder terreno ante una lucha de titanes por ocupar los primeros puestos de la prueba.
Estrategia de veterano
El leonés intentó primero ubicarse cerca de la cuerda aunque posteriormente necesitó de un esfuerzo extra para acabar en la segunda calle, menos comprometida. Al toque de campana la puja por el podio era cosa de cuatro (Ibrahimov, el irlandés ‘Ólionáird, Kowal e Higuero) mientras que Roberto se batía por un puesto de honor junto a dos pesos pesados como Kawal y Akkas y un invitado inesperado como el belga Tijtat.
Por delante, Higuero, pletórico, esprintaba para adelantar a dos de sus rivales y colgarse la plata (7:50.26) a la estela de Ibrahimov (5:49.74). Detrás, Aláiz, con un final explosivo similar a de las semifinales se hacía de Tijtat cruzando la línea de meta en una brillante séptima posición en su debut en un Europeo (7:55.12). E incluso estuvo cerca de subir un peldaño más, al sexto, del que le separaron 23 centésimas.