«Dos medallas, no puedo pedir más»

Lidia Valentín reflejaba en su rostro la felicidad propia de un triunfo que la berciana llevaba persiguiendo a nivel internacional. «Han sido dos medallas. No puedo pedir más», precisaba.

«Me voy muy contenta no sólo por el resultado, también por mi actuación. Era consciente que partía con muchas opciones de victoria pero también que había que lucharla. Además, he tenido una rival complicada como la egipcia Khail, con la que coincidí en los Juegos de Londres, que me lo ha puesto complicado. Incluso en dos tiempos fue por delante de mí pero en el último intento con su nulo me abrió de par en par las puertas del oro».

Para la leonesa, «España ha demostrado en los Juegos Mediterráneos que tiene presente y futuro en la halterofilia».