Los españoles Jordi Torres y Alex Rins se imponen en Moto2 y Moto3

Jordi Torres (Suter) logró el mejor resultado de su corta pero prolífica carrera deportiva al imponerse en Moto2, en tanto que Pol Espargaró (Kalex), tercero, consiguió recortar puntos al líder del mundial, el británico Scott Redding (Kalex).

Torres planteó una estrategia magistral de la prueba, en la que reconoció que salía «a aprender», pero lo hizo rápido y después de aguantar un buen tiempo tras la estela de Pol Espargaró vio su oportunidad y la aprovechó para ganar su primer gran premio del mundial y con su primer recuerdo señalando al cielo, a la memoria de su hermano Rubén, también piloto, que murió en el año 2006 en un trágico accidente en el circuito de Montmeló.

Alex Rins (KTM) fue la sorpresa en Moto3 al romper la racha de tres victorias consecutivas que acumulaba el líder del mundial, Luis Salom (KTM), a dos curvas del final.

Rins esperó su oportunidad, se pegó mucho a su rival y a dos curvas del final le superó para alzarse con la victoria. Viñales no paró de boicotearle, pero porque también tenía ritmo. Junto a ellos un Miller que para tener la Honda tan delante tenía que disputar todas las vueltas como si fueran la última, hasta que terminó por ceder.

Con los tres jinetes en solitario y a tres giros del final, Salom demostró una gran fortaleza. De un solo hachazo el de Red Bull, tercero, se quitó de encima a Rins y Viñales, y en apenas medio circuito ya había abierto un hueco de medio segundo. Rins no se rindió, sabedor de que un nuevo triunfo de Salom habría sido el cuarto consecutivo y un golpe definitivo para su moral. Se fue a por él con Viñales enganchado y los tres llegaron juntos a los últimos metros.

Ahí fue Rins quien se lanzó al hueco, al límite, olvidando su supuesta ‘timidez’ en este tipo de lances para ganar el gran premio.