SEGUNDA DIVISIÓN. LA DEPORTIVA SE ADECÚA AL REGLAMENTO
Dos porterías sin medida
El colegiado que arbitró el partido entre la Deportiva y el Recreativo reflejó en el acta que las dos porterías de El Toralín no tienen la altura reglamentaria .
Las porterías de El Toralín no tienen las medidas reglamentarias.
Curiosidad y anécdota o advertencia. El partido entre la Deportiva y el RC Recreativo no va a pasar a la historia por el buen papel del conjunto de Claudio y por el triunfo holgado ante un rival que llevaba una sola derrota hasta entonces. La redacción del acta ha llamado la atención a nivel nacional sobre un asunto que ya se ha producido esta campaña en algún otro estadio: la incorrecta medida de las porterías.
José María Sánchez Martínez, árbitro del duelo del último domingo, tuvo poco menos que ojo de lince al ver a larga distancia que los 2,44 metros reglamentarios entre el suelo y el larguero no se cumplían en más que una de las seis medidas que tomó antes del comienzo del choque, tres en cada marco. Ello lo reflejó en el acta e incluso pidió a los equipos que firmasen un documento en el que accedían a jugar en esas condiciones, si estaban de acuerdo en hacerlo con la medidas que reflejó en sus anotaciones.
Lo que dice el acta
El colegiado de Lorca reflejaba la irregularidad de las medidas de la portería en el acta y hacía firmar a los equipos. Lo redactó así: «En la revisión previa al comienzo del partido detectamos visualmente que ambas porterías tenían una altura inferior a la reglamentaria. Solicitamos una cinta métrica al club local, y realizamos las siguientes comprobaciones: Portería lateral derecha a la salida de vestuarios: -altura poste derecho, 2,47 metros; -altura centro portería, 2,40 metros; -altura poste izquierdo, 2,46 metros. Portería lateral izquierda a la salida de vestuarios: -altura poste derecho, 2,46 metros; -altura centro portería, 2,37 metros. -altura poste izquierdo, 2,44 metros. Antes del comienzo del partido se informó a ambos clubes de tal circunstancia. Los clubes, conocedores de las anomalías, confirman su deseo de disputar el partido mediante un documento escrito, firmado en mi presencia antes del comienzo del partido. Dicho documento firmado se enviará anexado al presente acta».
Se está convirtiendo en norma común en esta temporada en la categoría de plata el problema con las porterías. De hecho, lo vivido en El Toralín ya se ha producido esta temporada en un par de ocasiones en La Victoria de Jaén.
Ahora habrá que ver si la RFEF pone algún problema, aviso o multa a los clubes por una circunstancia que no deja de ser fortuita.
Desde el club tampoco se le ha dado mayor trascendencia a una circunstancia que no deja de ser una anécdota y que salvo a Sánchez Martínez, que notó a distancia que la distancia entre el suelo y el larguero junto a un poste era dos centímetros superior a lo normativo, a nadie le ha llamado ni siquiera la atención.
El motivo de las oscilaciones en las medidas según el punto de las porterías que se tome como referencia está en las variaciones del terreno de juego. El desgaste del campo por la lluvia o por las pisadas de los porteros llevan a que cada poco haya que restañar los daños provocados en la zona. La mayoría de las veces se soluciona el asunto echando un poco de arena o cambiando alguno de los tepes de césped de la zona. Eso hace que pueda haber oscilaciones en ese lugar o incluso en otros del campo. Dichas variaciones son muy leves, pero tratándose de la portería, en la que hay una referencia en vertical en la que poder establecer una medida, la trascendencia es un poco mayor.
Evidentemente ni las porterías están torcidas ni mal hechas ni tienen defectos. Es el terreno de juego el que provoca la incorrección.