Todo o nada entre Marc y Jorge

Una nueva victoria, la octava de la temporada, sería la opción más clara, aunque no suficiente, de Jorge Lorenzo (Yamaha) para mantener el título mundial de MotoGP ante un casi infalible Marc Márquez (Repsol Honda). Lorenzo ha conseguido nada menos que siete victorias en lo que va de temporada, por seis de su rival y líder de la competición, que, merced a la bonanza en el capítulo de las lesiones, ha podido mantener una línea regular a lo largo de todo el año.

Después de la sexta plaza conseguida en el circuito californiano de Laguna Seca, Jorge Lorenzo ha encadenado una racha de resultados que le ha mantenido en todo momento sobre el podio, con cuatro victorias, un segundo y tres terceros, aunque la racha de su rival tampoco es desdeñable, pues salvo el fiasco de Australia, en donde fue descalificado, desde Laguna Seca acumula otras cuatro victorias y cuatro segundas posiciones.

El enfrentamiento por el título mundial, ahora sí a una sola carta y en el circuito «Ricardo Tormo», apunta a una lucha de titanes entre los dos pilotos más en forma y eficaces de todo el campeonato, el doble campeón del mundo de Yamaha y el debutante de la escudería Repsol Honda, que acumula a sus espaldas numerosos récords de precocidad en la categoría.

Un final apretado

Ni el propio Marc Márquez contaba con llegar a un final de temporada como el que está viviendo y aunque la ventaja es suya, con trece puntos de diferencia respecto a Lorenzo, no se fía de nada ni de nadie y a Cheste llegará con el mismo plan de trabajo y con una premisa más clara aún de cuanta la tuvo durante el resto de la campaña: no cometer errores. En el caso de ganar Lorenzo, el que sería su octavo triunfo del año, a Márquez le bastaría con ser cuarto, un resultado que no ha protagonizado en la temporada ya que su peor clasificación han sido tres terceros.

Si Lorenzo no logra el triunfo, objetivo hasta cierto punto complicado al estar en pista el otro piloto del equipo Repsol Honda, Pedrosa, a Marc le bastaría con marcar de cerca a su rival. Márquez tendría entonces como único objetivo que Lorenzo no sume una diferencia de 13 puntos respecto a él, lo que le daría el título, empatados a puntos, al de Yamaha por el mayor número de victorias durante el año.