José Mario Carrillo, de casi desahuciado, a máximo goleador en la Liga
La trayectoria de José Mario Carrillo, máximo anotador de la Liga Asobal y que ayer marcó el gol que dio el pase del Ademar a la fase de grupos de la Copa EHF, no ha sido nada sencilla, ya que a pesar de su juventud ha tenido que superar una grave lesión y mucha desconfianza en sus posibilidades.
Estas trabas han propiciado una madurez que empieza a dar sus frutos ya que este extremo izquierdo, forjado en la cantera leonesa, es el máximo goleador de la liga y pieza indiscutible en el esquema del Reale Ademar.
Ayer fue protagonista de la épica victoria europea ante el RK Nexe croata (33-28) que valió la clasificación en la Copa EHF por el doble valor de los goles marcados en campo contrario, ya que la eliminatoria concluyó en empate.
El gol anotado ayer, al transformar una pena máxima con el cronómetro a cero, fue la ratificación que necesitaba un jugador que seis años antes había vivido algo idéntico, curiosamente en otra eliminatoria europea, ante el RK Zagreb.
"Entonces era un chaval y lo viví desde las gradas como un aficionado más y, pasados los años, he podido ser el protagonista de una acción muy similar que te produce una alegría indescriptible. Ha sido el momento más importante de mi vida deportiva", ha relatado hoy a Efe el joven jugador.
Con 23 años, es un producto más de la prolífica cantera ademarista. Se fraguó en el Colegio Hermanos Maristas para ir dando pasos hasta ser internacional júnior.
Parecía complicada su entrada en el primer equipo, incluso hace dos temporadas llegó a estar descartado al no entrar en los planes del entonces entrenador Isidoro Martínez, a pesar de haberle tenido a sus órdenes en el combinado nacional júnior, pero al final aceptó el reparto de un papel secundario.
Cuando parecía que podía aprovechar la ausencia de otros compañeros de posición sufrió una grave lesión de rodilla, tras su debut europeo ante el Partizán de Belgrado en la Liga de Campeones, lo que le hizo perder toda la temporada 2011-12.
En la pasada campaña, ya sin el extremo Martin Stranovsky en el equipo tras su fichaje por el Barcelona, permaneció a la sombra del internacional brasileño Felipe Borges, hasta que tras la marcha de éste al Montpellier, por los impagos del club leonés, adquirió todo el protagonismo y ya no se bajó de esa nube.
La entrada del joven entrenador Daniel Gordo le ha dado galones de titular indiscutible, también por ser casi el único jugador en su posición de extremo izquierdo, salvo el polivalente Sergio Mellado, y Carrillo ha respondido a lo grande al convertirse en el máximo artillero de la competición nacional con seis goles de promedio por encuentro.
"Todo ha sucedido muy rápido y casi sin tiempo para digerir, pero solo intento dar lo máximo, como el resto del equipo, cuando además ahora todos somos más imprescindibles", ha asegurado.
Carrillo quita importancia a la jugada que le ha convertido en una imagen más para la historia del club leonés porque contó "con toda la confianza del equipo". "Estoy seguro que también del pabellón. Por eso no pensé nada, no quise darle más vueltas, cogí el balón y puse todo el alma en lograr un gol que valía una clasificación", ha reflexionado.
Es uno más de los jóvenes que representan este nuevo Ademar, obligado a reestructurarse por la difícil situación económica de un club que a punto estuvo de desaparecer, y que ahora intenta resurgir con la calidad de jugadores como él, quien que en poco tiempo ha pasado casi del ostracismo, a ser el máximo artillero de la competición española y protagonista en la historia de su equipo.
