BALONMANO. COPA DEL REY
El Gijón apea al Ademar de la Copa (31-28)
Los leoneses, víctimas de sus errores, sufren la tercera derrota consecutiva.
El Reale Ademar no supo frenar la segunda oleada del conjunto asturiano y sucumbió ante un Juanfersa Gijón que aprovechó mejor sus momentos de inspiración.
El Reale Ademar quedó eliminado a las primeras de cambio de la Copa del Rey después de sufrir la tercera derrota consecutiva, la última en tierras asturianas, frente a un recién ascendido, el Juanfersa Gijón, que supo aprovechar mejor sus buenos momentos para llevarse el partido (31-28).
Los leoneses tuvieron un arranque impecable para endosarle al rival un parcial de 0-3 en los primeros cuatro minutos de duelo, que auguraban un encuentro plácido para los de Dani Gordo. Nada más lejos de la realidad. Y eso que el conjunto marista amplió la diferencia hasta el 1-5 en estos primeros compases.
Alberto Suárez pidió un tiempo muerto para cambiar la dinámica. Pasaron algunos minutos hasta que el envite comenzó a equilibrarse debido a la sequía goleadora de los dos contrincantes.
Los errores en ambos lados de la pista eran continuos y a los doce minutos de juego el luminoso reflejaba un paupérrimo 2-6. El técnico asturiano solicitó un nuevo tiempo muerto para impulsar la reacción de los suyos, que llegó tras la reanudación. El partido cambió radicalmente. Álex Costoya empezó a funcionar en ataque, Cakic subió las pulsaciones y Savic estuvo mucho más acertado en portería. Eso dificultó el trabajo del conjunto leonés, que se vio sorprendido, tanto que tiró por tierra su renta hasta un 9-8 que cambiaba por completo la dinámica del partido. Los locales no fueron capaces de ampliar esa distancia y la igualdad se mantuvo hasta enfilar el túnel de vestuarios (14-15).
Después, el mismo guión que al principio. El Reale Ademar salió con el cuchillo entre los dientes y le endosó al Gijón un 0-2 que devolvía la ventaja de tres tantos. Una vez más, la mala salida local obligó a su técnico, Alberto Suárez, a pedir su último tiempo muerto a falta de 27 minutos por delante. Sin embargo, nada pareció cambiar y la ineficacia del ataque local provocó que cargaran su juego sobre Álex Costoya. Eso facilitó la defensa de los visitantes que, tapando bien el lanzamiento exterior asturiano, ponían contra las cuerdas al Gijón. Peró el Juanfersa recucitó cuando peor pintaban las cosas. En esta ocasión fue de la mano de Cakic, que aprovechó los espacios que dejaba la defensa marista, concentrada en taponar al cañonero Costoya. Encontró los espacios necesarios para lanzar con cierta comodidad y poner, con su sexto gol, un 18-19 que volvía a abrir el encuentro. Los asturianos estaban crecidos y, ahora, era el Ademar el equipo que no encontraba su juego.
El técnico Dani Gordo dio entrada al pivote Gonzalo Carou para intentar cambiar la dinámica, pero el jugador argentino todavía no se encuentra al 100% y, por tanto, estuvo muy lejos de su mejor versión. Además, un Dacevic desafortunado en la noche de ayer, fue excluido y dejó a su equipo en inferioridad, algo que aprovecharon los asturianos para empatar el partido (26-26). A partir de ahí, el bloque asturiano ya había entrado en una dinámica positiva, imparable, y los leoneses no veían la manera de darle la vuelta al partido. A falta de tres minutos para el final, el lateral balcánico tuvo que volver al banquillo por su tercera exclusión, y el partido murió ahí. León lo intentó pero la inferioridad fue una losa demasiado grande y los locales acabaron por llevarse el duelo (31-28).
