«A la Cultural le deseo lo mejor pero el Caudal necesita ganar el domingo»

Miguel Ángel Álvarez Tomé (León, 1958) se ha convertido en el nuevo entrenador del Caudal Deportivo de Mieres. El técnico leonés regresa de esta forma a los banquillos. Su misión no es fácil, debe de intentar sacar al conjunto asturiano de los puestos de descenso que ahora ocupa en el grupo primero de la Segunda División B. El leonés llega al equipo asturiano convencido de que puede conseguir el objetivo planteado por la directiva del club mierense. El entrenador ya ha demostrado su capacidad como técnico en la Cultural, Ponferradina, Zamora, Granada y Alavés, además de en los equipos del Atlético Astorga, Atlético Bembibre y Peña. «Voy a dejarme el alma por salvar al Caudal del descenso», expresa el técnico.

—El reto de salvar al Caudal del descenso de categoría es cuanto menos complicado, ¿no?

—Los números están ahí. El equipo sólo ha conseguido doce puntos en las últimas doce jornadas, pero si considerara que ya no hay remedio no habría aceptado ser el entrenador del Caudal. Queda casi toda la segunda vuelta y con trabajo por parte de todos se puede lograr. Al menos, voy a trabajar al máximo para conseguirlo. Por esfuerzo, lucha y sacrificio de todos estoy seguro de que no va a quedar.

—¿Considera que es un entrenador al que no le asusta ningún tipo de reto?

—Como entrenador siempre he sido una persona segura de mí mismo. Querría que la situación del Caudal fuera otra diferente, pero es la que es y lo que tengo que hacer junto al trabajo de todos es cambiar la dinámica. No me asusta. Es una gran satisfacción estar aquí. El trabajo y la sencillez serán la base de todo. Tenemos que ponernos a trabajar al máximo ya.

—¿Cree que su capacidad de trabajo es el argumento que valoran los clubes para contratarle?

—Soy una persona con capacidad de trabajo que intento llevar mis conocimientos al grupo para conseguir los resultados que todos deseamos. Tengo la esperanza de llevar a cabo una labor que dignifique el extraordinario trabajo que vamos a desarrollar por conseguir la permanencia en Segunda B.

—¿Qué pide a la plantilla para que a la postre se consiga el objetivo?

—Lo que quiero por encima de todo es gente comprometida para desarrollar un trabajo exigente en las jornadas que restan para la conclusión del campeonato de Liga. Para lograr la permanencia en la categoría, todos los que componemos la plantilla tenemos que involucrarnos al máximo.

—Pero el reto que emprende es complicado, ¿no cree?

—Es difícil, pero no imposible. Quedan jornadas suficientes con puntos en juego para tratar de permanecer en Segunda B. Si no creyera en las posibilidades del Caudal no me habría comprometido.

—Lo principal es que el Caudal sea más competitivo que nunca, ¿no?

—Hay que hacer que el equipo se muestre más competitivo que nunca. Entiendo la preocupación en la afición y directiva, pero estoy seguro de que la plantilla va a estar más comprometida que nunca para que el Caudal siga la próxima temporada en Segunda División B.

—¿Cuál es su máxima para conseguir el objetivo de la permanencia?

—Convencer a la plantilla para competir con todos nuestros rivales y aspirar a lo máximo en cada uno de los partidos que quedan del campeonato de Liga, un equipo trabajador que se identifique con la afición y la ciudad y que tenga claro que lo más importante es ganar.

—El primer rival es el equipo de su tierra y de sus amores, la Cultural. Vaya coincidencia, ¿no?

—Jugar ante la Cultural siempre es especial para mí. A la Cultural siempre le deseo lo mejor, pero el Caudal necesita ganar el domingo para sumar tres puntos que para nosotros son vitales para comenzar a salir de esa mala situación en la tabla.

—Es un entrenador habituado a jugar por ascender. Tiene un bagaje de diez liguillas de ascenso en su haber. ¿Por qué este reto?

—Nunca estuve, salvo en un par de casos, en equipos realmente capacitados para subir, por este motivo esta decisión creo que me hará crecer un poco más como entrenador.

—¿Qué concepción futbolística empleará?

—En esta categoría el entrenador tiene que adaptarse a la plantilla que tiene. Me gusta que mis equipos tengan la pelota, jueguen con la defensa adelantada, sean ambiciosos y tengan la meta rival como referencia. Está claro que debe haber equilibrio y que la organización y el trabajo defensivo es algo fundamental.