Victoria de oro de un sólido Ademar
El conjunto leonés impone su mayor poderío físico para derrotar a un Bidasoa que mantuvo el pulso hasta el final.
José Mario Carrillo fue ayer el máximo anotador del equipo leonés con ocho goles, seis de ellos logrados en la primera parte del partido ante el Bidasoa.
El Reale Ademar tuvo que esperar hasta los últimos veinte minutos de partido para encaminar su triunfo (24-29) frente a Bidasoa que, pese a ocupar el farolillo rojo de la tabla plantó cara a los leoneses, sobre todo en una primera mitad en la que remontó hasta cuatro goles en contra, yéndose al descanso con empate a 15 goles. Ya en la segunda parte, y tras unos primeros minutos de mucha intensidad defensiva e igualdad, Ademar impuso su mayor poderío físico y acabó rompiendo el partido.
El equipo leonés buscaba ayer un triunfo de oro en su lucha por mantener la quinta plaza, la ultima que da acceso a disputar la EHF Cup. A priori, los de Dani Gordo lo tenían fácil frente al colista de la Liga Asobal, un Bidasoa Irún que llegaba al partido con solo 9 puntos y tras sumar cinco derrotas consecutivas. Pero los locales no estaban dispuestos a regalar nada a nadie y saltaron a la pista dispuestos a plantar cara. Así, el choque comenzó con relativa igualdad y unos minutos de tanteo que llevaron el marcador hasta el empate a 3 goles. Pero los locales estaban jugando al limite de a legalidad y no tardaron en pagarlo: en el minuto 9´30 el colegiado excluyó a Crowley, y apenas un minuto mas tarde a Ugarte, circunstancia que Ademar supo aprovechar a la perfección para poner tierra de por medio (3-6).
No se vino abajo Bidasoa, que intentó meterse de nuevo en el partido y acortó distancia por mediación de Juan Agustín. Pero Ademar es mejor equipo. Los visitantes, con un buen trabajo defensivo y ataques certeros, sin forzar demasiado la maquina, conseguían abrir la brecha de nuevo hasta los tres goles e incluso ampliarla hasta los cuatro tantos poco después de que se cumpliese el cuarto de hora de partido (5-9).
El Ademar comenzaba a sufrir ahora más de lo previsto. Los locales, con empuje y una defensa muy agresiva estaban recuperando terreno frente al equipo leonés, que perdía demasiados balones y tenía ahora muchos problemas para anotar. Mientras, las contras locales seguían siendo letales e incluso en inferioridad Bidasea conseguía colocarse a solo un gol de distancia de su rival (13-14). No acabó ahí la cosa y casi sobre la bocina del descanso Agustín Vidal colocaba el 15-15 en el luminoso. Quedaban solo siete segundos para la finalización de la primera mitad y con ese empate se llegaba a un descanso que, a buen seguro, el técnico de Ademar iba a aprovechar para leer la cartilla a los suyos, que en los últimos cinco minutos de la primera mitad parecían haberse relajado en exceso, encajando hasta cinco goles en contra.
Las cosas cambiaron un poco en el inicio de la segunda parte y Ademar, al menos, consiguió cerrar bien en defensa impidiendo al menos que su rival continuase anotando. Parecía que los leoneses empezaban a sentirse cómodos y, aunque los locales volvieron a colocarse a solo un gol (17-18), un parcial de 0-3 abría la brecha hasta los cuatro goles a favor de Ademar (17-21, minuto 41).
A partir de ahí los de Dani Gordo parecían tener el encuentro controlado. Y así, aunque los locales lo intentaron casi todo, Ademar conseguía mantener su renta siempre por encima de los tres goles. Trabajando bien en defensa y sin arriesgar demasiado en ataque los leoneses acabaron de romper el partido a falta de cinco minutos para la conclusión, cuando se fueron de cinco goles. De ahí al final, Bidasoa siguió peleando por acortar diferencias y ofrecer una buena imagen a su público, pero León ya tenía el partido donde quería y supo jugar a la perfección los minutos finales.