Wei Yi, rey del Magistral

Todo indica que Wei Yi será una gran estrella del ajedrez en pocos años. A los 15, el gran maestro más joven del mundo confirmó en León que su meteórica trayectoria desde niño le catapulta a lo más alto. Paco Vallejo jugó muy bien en cinco de las seis partidas de la final (cuatro semirrápidas y dos rápidas de desempate), que terminaron en tablas. Y Wei Yi explotó de manera implacable un error del menorquín en la sexta, a dos jugadas por segundo.

El jugador chino de 15 años Wei Yi impuso así su ley en la final del XXVII Magistral de Ajedrez Ciudad de León tras derrotar en la segunda partida de desempate al español Francisco Vallejo, después de que al final de las cuatro primeras hubiera empate a dos, tablas que se repitieron en la primera de desempate.

El triunfo de Wei Yi supone la victoria del ajedrecista más joven en la historia del torneo leonés, en una edición que recuperó el formato de cuatro jugadores, al tomar parte también el campeón de España Iván Salgado y la campeona del mundo Yifan Hou.

Sión, impulsor del Magistral desde su inicio, ha visto pasar por la capital leonesa a otros talentos como el húngaro Peter Leko o, sobre todo, el vigente campeón del mundo, el noruego Magnus Carlsen, que venció en León en 2009, pero que en su primera participación con tan solo 14 años no ofreció la imagen tan contundente como la mostrada por Wei Yi.

Su ambición por llegar a lo más alto se demuestra en que dedique, según ha aclarado, ocho horas diarias al aprendizaje y perfeccionamiento del ajedrez a las órdenes del Gran Maestro Xu Jun, veterano capitán de la selección china que está moldeando en Pekín a un ajedrecista que, según los expertos asistentes al Magistral, «ya no solo demuestra agresividad, sino también estrategia».

Las dos primeras partidas mostraron la ambición del asiático que, pese a disponer de alguna ventaja para haber creado problemas a un jugador como Vallejo, curtido en mil batallas, finalmente las tablas fueron el resultado más lógico, porque tampoco hubo desequilibrios evidentes.

En la tercera, el mallorquín mostró un tono más ambicioso, con una posición prometedora que hacía presagiar un desenlace a su favor, pero Wei Yi dio muestras de su sensatez, quizá impropia para su edad, para acabar firmando de nuevo las tablas, tal y como ocurriría en la última de las cuatro partidas programadas en un principio.

Ambos jugadores, conscientes de que un error les conduciría a perder el choque, actuaron con la máxima prudencia, sin arriesgar lo más mínimo en sus estrategias para empezar a pensar en el desenlace de las partidas rápidas en las que, a priori, no había un favorito claro.

En la primera, con Vallejo moviendo con blancas, pudo y quizá debió haber sentenciado a su favor con un juego preciso, pero se vio apurado por el tiempo -cinco minutos- para dejar todo en manos del segundo choque de desempate, con Wei Yi con blancas, quien empleó una apertura Larsen que descompuso a su rival, que fue víctima de un grave error táctico para caer sin remisión y ceder el triunfo final.