«No puedo cantar victoria. Aún queda mucho camino»

El pasado viernes 16 de agosto el Cleba echó a andar. Lo hizo frente a uno de los gallitos de la liga, el Atlético Guardés y las sensaciones, a pesar de la derrota, fueron positivas. No solo por el juego de las leonesas, sino también porque en la cancha del Bembibre Arena, Alicia Cembranos volvió a sentirse jugadora, después de casi año y medio parada.

Ahora que ya ha hecho lo más complicado, que es regresar, la extremo izquierda de la entidad leonesa comienza una nueva etapa de su recuperación: asentarse, para volver a ser importante en una plantilla joven y necesitada de su experiencia.

— Lo primero darle la enhorabuena por su «debut». ¿Cuáles fueron sus sensaciones después de tanto tiempo?

—No puedo cantar victoria todavía, porque el partido contra el Guardés no es una prueba demasiado real. Jugué poco, pero me sentí mejor de lo que me esperaba. Me queda mucho camino, físico y mental, que es lo que más me cuesta.

—¿Cuál es el estado físico actual de Alicia Cembranos?

—Aún tengo molestias y algunos dolores, pero el otro día a la hora de lanzar me encontré bien. Se nota que el año pasado me cuidé, traté de hacer siempre ejercicio, bien aeróbico, bien de gimnasio.

—A pesar de la lesión, el presidente le considera el mejor refuerzo del Cleba a día de hoy. El anterior presidente le renovó. ¿La confianza del club en usted es total?

—Es algo digno de agradecer porque no todos los equipos lo habrían hecho. Pero como tal no he renovado. Me quiero probar, para saber qué es lo que puedo aportar y después ya veremos.

—¿Qué espera de usted el entrenador, Javier Callejo?

—No me quiere meter prisa. Es cauto y quiere que de lo máximo pero hasta donde pueda. Lo que busca en mí es la veteranía, ya que somos una plantilla joven y también seguridad en el lanzamiento.

—Contra el Atlético Guardés salisteis derrotadas, pero la imagen que dejó en líneas generales el equipo fue buena. Es buen inicio, pero queda mucho por recorrer.

—El otro día acabamos todas sorprendidas por nuestro juego. El Guardés es uno de los mejores equipos y no tendrá problemas para estar arriba. Pero queda mucho. Somos jóvenes y vendrán refuerzos que tendrán que acoplarse.

—A parte de la salud, ¿qué objetivos se marca individualmente?

—Recuperarme físicamente para ayudar al equipo. Estar lo mejor que pueda, porque veo complicado poder volver a estar al mejor nivel.

—¿Hasta dónde puede llegar el Cleba colectivamente?

—Es muy difícil hablar ahora. La Liga es muy variable ya que los de abajo hacen sufrir a los de arriba. Si nosotras mantenemos la línea del año pasado no deberíamos pasar problemas para estar en un puesto cómodo. No soy de marcarme objetivos a la baja.

—Para alguien que está en el parqué. ¿Qué tiene listo el equipo y qué necesita para la esta temporada?

—Ahora tenemos la continuidad que nos faltó en otras etapas. El entrenador vive aquí su segundo año y como hay pocos cambios en la plantilla, ya tenemos asimilado su esquema de juego. Por el contrario, necesitaremos saber llevar mejor los partidos.

—Una de las cosas que más preocupan en el entorno del Cleba es la propia supervivencia del club. Tanto Roberto Álvarez, el anterior presidente, como el actual, Óscar Andrés Martínez, tienen claro que hay futuro. ¿Cómo se ve desde el vestuario?

—Lo que nos muestran es que es viable, pero no lo sé. No tengo acceso a esos datos. Confío en ellos. Estamos tranquilas. ­