Diario de León

FUTBOL

La Deportiva anima la fiesta

Exhibición blanquiazul con remontada incluida y hat trick de Yuri ante el Real Betis

Yuri marcó un gol de cada forma. El 4-1 lo hizo rematando de tacón, que era la única manera de poder golpear el balón centrado desde la derecha para que cogiera portería

Yuri marcó un gol de cada forma. El 4-1 lo hizo rematando de tacón, que era la única manera de poder golpear el balón centrado desde la derecha para que cogiera portería

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F. ROBERTO OTERO | PONFERRADA
Ponferrada

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El público que ayer acudió a El Toralín y los aficionados que vieron el partido por televisión acabaron ilusionados, muy ilusionados. La Deportiva ganó al Real Betis, le bailó, le puso al pie de los caballos, le sometió a los ‘olés de la grada’, le hizo parecer un equipo «pequeño». Los que tuvieron que madrugar para ir a ver el partido matinal, aún no sabían bien si la Deportiva era la Deportiva y el Real Betis, el Real Betis o al revés.

El 4-1 final lo dice todo o casi todo. Y es que la Deportiva tuvo ocasiones claras para golear de verdad, o sea, para vencer por más de tres goles, que es lo que se considera una goleada. Dos palos (ya va haciendo méritos para superar los 19 de la pasada Liga) y tres balones rematados fuera a bocajarro y con el portero batido son ocasiones más que claras para haber visto un resultado escandaloso.

Manolo Díaz optó como en Gijón por retrasar un poco a Berrocal por detrás de Yuri. Lucas jugó como se esperaba en el centro de la zaga y la otra novedad, ésta quizá más inesperada, fue la titularidad de Óscar Ramírez en el lateral derecho. El catalán, como demostró en pretemporada, cada día se suma más al ataque y cada día centra mejor. Ayer, pleno de centros provechosos.

El Real Betis fue mejor hasta que marcó el gol, pero no gozó de excesivas ocasiones. Pidió un penalti sobre un Jorge Molina que antes culminó un perfecto contragolpe. El presunto penalti estaba precedido por un fuera de juego. Acorán ya había mandado un tiro al larguero y antes del descanso la Deportiva ya iba avanzando la que sería su cara en la segunda parte. Un pase de la muerte de Yuri no fue capaz de empujarlo a puerta un incansable Berrocal.

En la segunda mitad sólo existió la Deportiva. Con el público volcado y entusiasmado -parece que gusta el horario de las 12.00 horas en casa-, el equipo se desplegó en el campo casi como el único contendiente y se mostró como un martillo pilón ante el líder, que pareció todo menos eso. Tres tiros, tres goles antes del cuarto de hora. Primero Yuri desde el suelo tras un pase interior de Jonathan Ruiz. La fe del americano movió montañas y movió el cuero hasta el fondo de las mallas. Acorán logró el segundo sin ángulo tras irse del arquero en un pase de Pablo Infante a la espalda de la zaga. Y Yuri hizo el tercero en un servicio del tinerfeño. Pablo Infante se fue en una baldosa entre tres dentro del área, pero con todo a favor mandó al lateral de la red. Y al final Yuri remató la faena entrando a matar. Lo hizo de tacón en otro servicio desde la derecha de Acorán. Paglialunga, debutante como Tete, pudo hacer otro más, igual que Sobrino, que mandó al poste un tiro y su rechace contra Adán. Y hasta Yuri, poco antes de ser cambiado, tuvo una clara ocasión que marró sin portero en otro servicio de Acorán.

El equipo bético apenas inquietó el portal berciano en el segundo acto. Un par de remates lejanos y otro que atrapó Moldován fueron todos lso argumentos del conjunto de Julio Velázquez en medio de un chaparrón de lluvia y goles.

Como ante la Cultural

Si en diciembre del 2007 salió de El Toralín «flipando» por el ambiente que se vivió en el Deportiva-Cultural, llegando incluso a pedir el vídeo del choque a Televisión Ponferrada, ayer le tuvo que suceder algo parecido, aunque la afición le echó en cara varias acciones. De todos modos, hizo un arbitraje más que correcto. Tanto aquel duelo provincial como el de ayer los pitó Francisco Manuel Arias López y los dos acabaron 4-1.

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