La Deportiva mira arriba
El equipo berciano ratificó las buenas sensaciones de la pasada jornada ganando con solvencia en Los Pajaritos.
Yuri y Andy celebran el gol de éste último, que ponía a la Deportiva por delante en el inicio de la segunda parte.
Primer triunfo a domicilio de la Ponferradina, imponiéndose con claridad en el derbi de Castilla y León a un Numancia que volvió a acusar los errores de las primeras jornadas. Los de Manolo Díaz, en cambio, mantuvieron las buenas pulsaciones mostradas en el segundo periodo ante el Betis, con un Berrocal espléndido y con un futbolista, Pablo Infante, que sigue demostrando su valía así pasen los años. Tremendo que un jugador así jamás haya estado en Primera, pues el recital que dejó en Los Pajaritos es de los que se recuerdan.
Arrancó bien la Deportiva, ocupando mejor los espacios a pesar de un primer aviso del Numancia cuando no se habían jugado sesenta segundos, y que detuvo Dinu Moldovan. Los de Manolo Díaz se hacían con el centro del campo y creaban peligro en los balones por alto, hasta que al cuarto de hora se hacía justicia con el cero a uno. El primer gol de la Deportiva llegaba tras un saque de esquina botado por Pablo Infante, y tras un rebote en el área pequeña de los sorianos, el balón le caía a Berrocal y el ariete no desaprovechaba la oportunidad.
Pablo Infante tuvo el segundo apenas dos minutos más tarde, y con el equipo numantino totalmente grogui pese al empuje de Anquela desde la banda, Yuri tenía en su cabeza el cero a dos a los 24 minutos. Su remate lo atrapaba Biel Ribas con seguridad.
Pareció despertar el cuadro local tras esa jugada, creando su primera oportunidad clara en un lanzamiento de falta a cargo de Iñigo Pérez desde la frontal que se le marchó por encima del travesaño. Los sorianos dieron un paso hacia adelante, moviendo mejor el esférico y buscando las basculaciones a las bandas.
En el minuto 40, Natalio recibía un balón peinado por Sergi Enrich y empalmaba a la escuadra de Dinu. Su chut escorado se convertía en un golazo inesperado, ya que este control de los numantinos tampoco era agobiante y parecía que la Deportiva podría mantener la ventaja hasta el intermedio.
La segunda parte comenzó muy vibrante, con los dos equipos buscando desplegar un juego ofensivo. Dinu se mostraba muy seguro en los balones por alto que enviaban los centrocampistas sorianos, y en la primera oportunidad clara de la segunda mitad para los de Manolo Díaz, Andy se sacaba de la manga un trallazo estupendo desde larga distancia que superaba a Biel Ribas.
Pero el Numancia no estaba dispuesto a dejarse vencer con facilidad, obligando a Dinu Moldovan a intervenir con enorme seguridad apenas dos minutos después, en una ocasión clara para Sergi Enrich. También las llegadas de los visitantes, con el equipo de Anquela adelantando líneas, eran un riesgo claro y así Berrocal disparaba desde la frontal, fallando por muy poco. Pablo Infante era el encargado de conducir el juego de ataque de los visitantes en las contras, firmando un nuevo recital de calidad y combinación con sus compañeros, un futbolista excepcional.
El Numancia iba encerrando poco a poco a los del Bierzo en su parcela, pero con muy pocas ideas ofensivas. Fenomenal el trabajo de la Ponferradina en las coberturas, cerrando bien las bandas y haciendo que los minutos pasaran sin que sucediera apenas nada noticioso.
Y cuando ya pasaban cinco minutos del noventa, y con el Numancia volcado, un contragolpe letal de los bercianos acababa de poner la sentencia al encuentro. Sobrino se iba en solitario, con toda la pradera a su disposición, y tras una carrera solitaria definía a la perfección ante Biel Ribas. Un 1-3 que certifica el gran momento de la Ponferradina.