Un dispositivo de lujo

Cada mañana, el dispositivo de seguridad del Campeonato del Mundo de ciclismo se pone en marcha en el Cecor del Toralín a todos los niveles. El trabajo de la Policía Municipal de Ponferrada también pasa por coordinar las labores de los casi 70 voluntarios de Protección Civil, pertenecientes a las seis agrupaciones del Bierzo, que se distribuyen a lo largo del recorrido y colaboran en la seguridad del evento y dan asistencia a los aficionados que se acercan a presenciar las carreras en directo.

El mayor Arturo Pereira es el encargado de dirigir el operativo para que los ciudadanos, tanto de Ponferrada como del resto de municipios por los que discurre la prueba, vean reducidas al máximo las molestias que pueda causar el Mundial en su día a día.

Por su parte, la Policía Nacional coordina a las cuatro empresas de seguridad privada que dan servicio a la carrera (Garda, Eulen, Visegursa y Securitas) y cuyo cometido va desde controlar los accesos al centro de prensa del Toralín hasta vigilar los repetidores de televisión distribuidos por toda la comarca, pasando por la instalación y control de cámaras de seguridad en la zona de circuitos. En total, unas setenta personas en cada turno de vigilancia se encargan de complementar el trabajo de seguridad en la Burbuja del Mundial.

Pero además de la seguridad «preventiva», el Campeonato del Mundo también está preparado en caso de que se produzcan accidentes de cualquier tipo. Junto a la Zona Expo del Colomán Trabado nos encontramos con el flamante hospital de campaña de la Cruz Roja, estrenado para la ocasión, donde nos recibe la presidenta de la agrupación de Ponferrada, María Gutiérrez. Medio centenar de voluntarios, reforzados con compañeros de otras partes de la provincia, se encargan de atender «desde una picadura de abeja hasta la caída de las holandesas el sábado, a las que dimos los primeros auxilios», explica Gutiérrez.

Nueve ambulancias de la Cruz Roja se distribuyen por todo el circuito, tanto en el entorno urbano de Ponferrada como en lugares de paso de la carrera como Posada del Bierzo o la zona del pantano de Bárcena.

En la zona exterior de la Burbuja nos encontramos con el doctor Valdelvira, que dirige el dispositivo preventivo de emergencias sanitarias del Sacyl. El mismo está formado por una unidad médica de emergencias (UME) y otra de soporte vital básico que prestan servicio junto a la meta más otra que se encuentra en el ambulatorio de Picotuerto. Además, el Sacyl ha movilizado también un helicóptero (HEMS), que tiene su base en el Hospital El Bierzo, para eventuales traslados urgentes.

En total, son más de una decena de personas, entre médicos, enfermeros y técnicos, que se encargan de «dar apoyo a los servicios sanitarios del Mundial y dar cobertura al aumento de población que se espera en los próximos días», comenta el doctor Valdelvira.

Todos ellos son los ángeles de la guarda que velan porque el Mundial se desarrolle con el menor número de incidencias.