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BALONMANO

Agarrados a la inercia de Suiza

El Abanca Ademar quiere trasladar hoy al partido de liga ante el BM Aragón las buenas sensaciones del rotundo triunfo ante el Bern Muri en competición europea.

Los canteranos Diego Piñeiro y Mario López durante una sesión de entrenamiento en el Palacio de Deportes.

Publicado por
georgino fernández | león
León

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El ‘bálsamo’ europeo tiene que ser de efecto duradero. No vale una sola aplicación. Es el propósito con el que hoy (20.45) el Abanca Ademar volverá a tomarle el pulso a la liga tras su rotundo triunfo el pasado sábado ante el Bern Muri suizo (30-38) en su debut en la competición europea. Y por supuesto es el deseo de una afición que no desea esperar más para disfrutar en casa de un triunfo solvente de los suyos. Y la visita esta tarde del BM Aragón —colista de la Liga Asobal— parece, sobre el papel, la mejor ocasión.

«Los buenos momentos para ganar son siempre» reseña el técnico, Dani Gordo, pero a la vez concede que el equipo está en deuda con la grada después de que los dos últimos partidos de liga ante Granollers y Naturhouse concluyesen con dos severos correctivos. «Es indudable —añadió— que a todos nos gustaría volver a reencontrarnos con la victoria tras esas dos derrotas».

En todo caso y fiel a su estilo huye de cualquier atisbo de confianza. Es consciente de que el BM Aragón no pasa por su mejor momento —de hecho reconoció que ya es un triunfo que haya podido salir a competir esta temporada— pero los favoritismos deben demostrarse sobre el parqué no en las declaraciones previas. «Partimos del máximo respeto a nuestro rival. Creo además que ni los números ni su puesto en la tabla hacen justicia a su nivel como equipo». Al hilo de estas palabras subrayó que el conjunto maño entrenado por un ex ademarista como Demetrio Lozano tiene un siete competitivo en el que destacan jugadores con proyección como Javier Ariño junto a veteranos como Asier Antonio o Alberto Val. Además, incidió en que saben que saben que tienen mucho que ganar y poco que perder por lo que jugarán sin esa dosis de presión añadida.

Pero no lo ven exactamente así los maños que llegan a León con la clara intención de estrenar su casillero de victorias. El equipo zaragozano se ha quedado como farolillo rojo de la Asobal tras la victoria la pasada jornada del Ciudad Encantada frente al MMT Seguros Zamora y necesita un triunfo para recomponer su maltrecha moral y para que los rivales que le preceden en la tabla no abran un hueco que pueda llegar a ser insuperable. Al equipo que entrena Demetrio Lozano le está lastrando tanto su falta de efectividad en el remate a puerta, ya que es el segundo equipo que menos goles ha anotado (136), sólo por encima del Gijón (133), como su poca seguridad defensiva ya que también es el segundo que más tantos recibe (187), únicamente superado en este aspecto por el Puerto Sagunto (200). A la vista de todo esto y del conocimiento del feudo leonés el propio Lozano (que a pesar de estar retirado está sopesando volver a vestirse de corto para ayudar a los suyos) reconocía que el partido de esta noche «no parece el más propicio» para sumar la primera victoria.

Para este partido el equipo leonés mantiene la baja de Mikel Aguirrezabalaga, de quien no se quiere forzar la recuperación de sus lesiones y del meta Rogelio Llamazares, tocado en un pie. Ayer no entrenó y dependerá de cómo se encuentre. Su lugar lo ocuparía de nuevo Teijón.

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