Encefalograma plano

Pocos equipos encontrarán tantas facilidades para imponerse al Atlético Astorga en su feudo como el Zamora. El equipo visitante con sólo mantener el orden defensivo y aprovechar los espacios y errores maragatos logró una cómoda victoria (0-4) ante un conjunto que no existió, que careció de ideas, y que nunca fue capaz de dar la sensación de lograr algo positivo.

Carlos Tornadijo no estuvo acertado con su planteamiento. Si en otros encuentros sus decisiones y cambios resultaron decisivos en los triunfos o empates de su equipo, en esta ocasión dio demasiadas facilidades. La entrada de Asier por vez primera en el once titular obligó al técnico a colocar a Ivi Vales en la punta del ataque, lo que supuso que el Atlético Astorga jugara con dos hombres menos, el primero porque apenas exisitó y participó en el evento, dando muestras de una excesiva apatia, y el segundo porque fuera de su sitio baja de forma alarmante su rendimiento, además de no ser un hombre que pueda aguantar de espaldas a portería el balón en los saques largos de Luis o balones aéreos. Además, esta situación obligó a correr a lo ‘tonto’ a Porfirio y Taranilla y favoreció el juego de contragolpe de los zamoranos, que con sólo defenderse impedían que su portero tuviera que aparecer. Junto a ello, la falta de presión en la línea de salida (que diferencia entre Asier y Borjas en ese aspecto) hacía que el centro del campo tampoco presionase como en anteriores ocasiones, permitiendo las entradas de Coque y Gavilán cuando y como querían, favorecidos además por un dubitativo Llamazares que no atraviesa su mejor momento.

Pese a ello, Luis mantenía al Atlético Astorga en el partido, hasta que en el minuto 26 un saque largo de Cantero a la espalda de David Uña permite que Gavilán fusile a placer al meta astorgano, estableciendo el 0-1.

Con el marcador a favor el Zamora repliega todavía más sus líneas, esperando agazapado un nuevo error de los locales, y aunque todavía dispusieron de alguna ocasión más a la contra Luis evió la debacle y permitió al equipo leonés llegar al descanso con opciones.

Tras el paso por vestuarios la situación para los leoneses empeoró un poco más, porque el Zamora jugaba sin ningún tipo de oposición ante un Atlético Astorga completamente plano y sin ideas que era incapaz de acercarse a los dominios de Cantero.

En el minuto 61 empezó la debacle anunciada. Un libre directo botado sobre el área zamorana es aprovechado por el equipo visitante para salir en una contra fulgurante que permite a Coque, uno de los mejores del partido, batir a Luis sin oposición para establecer el 0-2.

Cuatro minutos después, y en una jugada calcada a la anterior, David Uña detiene con la mano un remate sobre la meta local con Luis ya batido, decretando el colegiado el claro penalti y la expulsión del defensa astorgano. Arkaitz se encarga de ejecutar la máxima pena engañando completamente a Luis para colocar el 0-3 en el luminoso cuando se cumplía el minuto 66.

La entrada de Borjas dio otro aire al conjunto leonés, pero todo siguió igual hasta que en el minuto 88 Arkaitz bate a Luis con un soberbio remate cruzado de derecha a izquierda que se cuela como un obús por la escuadra derecha de la meta astorgana. Era el 0-4 que completaba la goleada zamorana.

Pese a ello el Atlético Astorga siguió intentándolo rematando de cabeza Borjas un centro desde la derecha que atajó sin mayores problemas Cantera. Era el minuto 89, siendo noticia por ser el primer y único remate entre los tres palos de los astorganos.