El Calderón se ha convertido en un auténtico fortín para los colchoneros
El Atlético de Madrid cierra un 2014 con 79 puntos de 111 posibles, 62 goles a favor y tan solo 29 en contra en 37 partidos, en un año en el que Simeone consiguió también su victoria número cien en el banquillo rojiblanco. Pero si hay algo que demuestra los números de este año que ya termina es que el estadio Vicente Calderón se ha convertido en un auténtico fortín para los colchoneros. A orillas del Manzanares, el Atlético tan sólo ha cosechado dos derrotas en 28 partidos disputados, una ante el Real Madrid en Copa del Rey y la última ante el Villarreal en un partido de Liga. De los 26 partidos restantes, los colchoneros lograron 20 victorias y seis empates, unos números que no hacen más que engordar el año histórico de los rojiblancos.
En el estadio Vicente Calderón se empezó a forjar el camino hacia la final de Lisboa, donde equipos como el Milan, el Chelsea o el Barcelona no fueron capaces de derrotar a los colchoneros en la máxima competición europea. Incluso en competición liguera donde, hasta la visita del Villarreal, el Atlético llevaba sin perder como local desde el 13 de mayo de 2013, cuando cayó ante el Barcelona, por 1-2. La propia plantilla destacó durante la temporada la importancia de jugar en un Calderón lleno porque supone salir al campo con doces jugadores en lugar de once. Esta racha extraordinaria está lejos de los 46 partidos sin perder entre 1960 y 1963 cuando el Atlético disputaba sus partidos en el Metropolitano. Pero con estos números, se cierra un año que tanto la afición rojiblanca como el club jamás olvidarán. Mario Mandzukic, Antoine Griezmann o Miguel Ángel Moyá, jugadores recién llegados, son los encargados de continuar con el buen estado de forma del Atlético.