Tablas con reivindicación
Aduriz y Sergio García firman el empate en una jornada de gran ambiente y en la que se volvió a pedir la oficialidad de las selecciones de Euskadi y País Vasco.
Los futbolistas portaron pancartas para reivindicar la oficialidad de sus selecciones.
La selecciones vasca y catalana de fútbol repitieron en San Mamés el empate de sus dos enfrentamientos en los últimos años, una igualada a un gol plasmada con tantos de Aritz Aduriz a poco de comenzar el choque y Sergio García, cerca del descanso.
Aduriz, por cierto, continua con su racha en este tipo de partidos, ya que también marcó en el 2-2 de octubre de 2006 en el Camp Nou y en 1-1 de la vuelta en la vieja Catedral en diciembre de 2007. El ariete internacional suma ya 10 goles con la selección de Euskadi.
Los combinados vasco y catalán conmemoraron en un ambiente festivo y con continuos gritos a favor de la independencia el centenario del primer amistoso en el que se midieron ambos, el que se disputó en la antigua ‘Catedral’ el 3 de enero de 1915.
Comenzaron mejor los del tándem José Mari Amorrortu-Mikel Etxarri, especialmente Aduriz, que abrió el marcador en el minuto 3, a punto estuvo de marcar en dos ocasiones más y dejó un gol hecho a Ibai Gómez.
El ariete internacional puso el 1-0 aprovechando un tiro fallido de Capa desde la frontal tras un centro de Iturraspe y una primera dejada del propio Aduriz, y también de que un defensa visitante quedó descolgado y le habilitó la posición.
Nueve minutos después, el donostiarra se coló por la línea de fondo y cedió a Ibai, quien, solo y con toda la portería para él, remató desviado.
Pasado el cuarto de hora inicial, los de Gerard López le fueron cogiendo la onda al partido y empezó a crear serio peligro sobre la meta de un Iraizoz que malogró hasta cuatro ocasiones rivales, dos a Sergio García y otras dos a Jonathan Soriano.
Pero no pudo con un disparo cruzado de Deloufeu que se le metió entre las piernas y acabó dando en el palo; tampoco con un disparo de Soriano que acabó en la red, aunque la jugada fue anulada por un inexistente fuera de juego; y, sobre todo, con el empate de Sergio García, tras regatear dentro del área a un Íñigo Martínez que se resbaló en el momento decisivo.
Con dos onces radicalmente diferentes, la segunda parte no fue tan intensa y brillante, pero continuaron las ocasiones de gol. Si bien, en menor cantidad y con menor claridad.