Yeray no especula con el Palacio

Yeray Lamariano vivió la semana pasada de forma intensa. «Fueron días complicados», reconoce. El domingo 1 de marzo jugó con el Balonmano Nava, su anterior equipo, en Córdoba. Un desplazamiento por carretera de casi mil kilómetros hasta volver al punto de partida.

«Y el lunes ya estaba negociando con el Ademar», explica. No tuvo casi tiempo para digerirlo. Debutó 24 horas después de su presentación. Y lo hizo en el Palacio frente al Granollers, verdugo de los leoneses en la primera vuelta, aunque después del parón parece que se han igualado las fuerzas, al menos así lo dictan los dos empates cosechados ante los vallesanos en Copa del Rey y en Liga, éste último el pasado miércoles. «Estoy contento por la acogida. También por el trato que me han dado en el Balonmano Nava, a los que estoy muy agradecido. El Granollers es un equipo que este año ha demostrado que está algo mejor que nosotros. Tienen grandes jugadores y, aunque venían con alguna baja, el empate es justo. Y el punto, a largo plazo, bueno», matiza.

Mañana encuentra otro reto de altura. Visitan una de las canchas más complicadas de la Asobal, la de un Naturhouse que está varios peldaños por encima de los leoneses. Pero Yeray Lamariano no renuncia a sorprenderles en su feudo, a pesar de que Logroño «lleva en su ADN el juego táctico».

Para multiplicar sus opciones, «tendremos que estar muy concentrados y unidos porque son un equipo experto», subraya el portero marista, que respondió a las expectativas en este primer envite de su segunda etapa en el conjunto leonés. Tiene clara su función. «Mi objetivo personal no es otro que el de ayudar al equipo en todo lo que pueda. He venido a León para sumar», advierte.

Es consciente de la importancia que tiene para el club acabar la temporada en esa cuarta o quinta plaza que conducen hasta la próxima edición de la Copa EHF. «Está claro que ése tiene que ser nuestro objetivo porque si lo conseguimos sería un muy buen resultado», apunta. Y asegura que los puntos de casa «son innegociables». Por el Palacio aún tendrán que pasar rivales directos como Cangas, Anaitasuna y Benidorm. «Aunque también tendremos que rascar algo fuera», reconoce.

Confía en las posibilidades del Abanca Ademar. «Somos una plantilla muy joven y en los encuentros a domicilio será fundamental la concentración que tengamos todos. Si lo hacemos bien podremos ganar lejos del Palacio», asegura. «Hay un grupo humano muy bueno y jugadores con mucha calidad en la plantilla. Estoy muy contento de volver a estar en el Ademar y agradecido a todos mis compañeros por la acogida que me han dado. Así es todo más fácil», declara.