Éxito con sello leonés

España sumó un nuevo éxito en su periplo internacional. Y en ese resultado ha tenido mucho que ver la leonesa de Valencia de don Juan, María Casado. En esta ocasión el escenario fue las World Series que hacían escala en Canada con las mejores selecciones del mundo en la modalidad ‘seven’ donde las ‘Leonas7s’ se apuntaban la victoria en la Copa de Bronce tras superar en las semifinales a China por un claro 35-15 y posteriormente deshacerse en la final de Brasil en un pulso igualado en el que el ensayo de María cuando el marcador reflejaba un empate a siete fue determinante para que el triunfo se decantara del lado español por 14-12.

María Casado, habitual ya en las convocatorias de la absoluta, se convirtió en una pieza fundamental en el ‘siete’ que viajaba a Canadá para medirse las grandes selecciones del panorama internacional. Precisamente en el sorteo de emparejamientos a España le tocaba nada menos que el grupo más exigente con Nueva Zelanda, Inglaterra y Fiji como adversarios. Frente a las dos primeras y a pesar de aguantar buena parte del partido no se podía hacer nada mientras que con Fiji se pujó hasta los instantes finales por una victoria que hubiera posibilitado a las ‘Leonas7s’ el pase a la Copa de Plata.

No fue posible. Eso sí, como consuelo llegaba el acceso a la Copa de Bronce. Y ahí María Casado y sus otras siete compañeras (el seleccionador sólo pudo contar para los dos últimos encuentros con ocho jugadoras tras las lesiones de Esbrí, Medín, Berta García y Schiavón) mostraban un rugby de alta escuela que le permitía superar en las semifinales a China por 35-15 tras sellar en la primera parte la victoria con un claro 20-0. En esta victoria, a pesar de no contabilizar ningún ensayo, la leonesa María Casado se erigía en una de las bazas ofensivas de España a la que sólo la relajación en los minutos finales le impedía contabilizar un marcador más amplio.

La medalla estaba asegurada pero había que luchar por el peldaño más alto y en la final la selección española saltaba al terreno de juego de Langford con un hambre de triunfo que le permitía adelantarse 7-0 en los compases iniciales. Esa ventaja era neutralizada por Brasil con otro ensayo y posterior transformación dejando las tablas para el descanso.

La salida de vestuarios iba a repetir los mismos parámetros que en la primera parte. España salía decidida al ataque y ahí aparecía María Casado que con su calidad lograba un ensayo que situaba el 12-7 en el electrónico. La posterior transformación de Patricia dejaba muy encauzada la victoria. A pesar del ensayo de Brasil en los minutos finales su fallo en la transformación y la excelente defensa de las españolas posibilitaban que el marcador ya no se moviera y el ‘seven’ hispano levantó el trofeo de campeón de la Copa de Bronce en Canadá.