León despide a La Roja... y a Piqué sin abucheos

La selección descansa en estos momentos en el Hotel Luis de León, después de entrenar en el Reino durante una hora, desde las once de la mañana, y antes de poner rumbo al aeropuerto de La Virgen del Camino, donde cogerán un vuelo chárter a las tres de la tarde.

Unos sesenta aficionados se acercaron hasta el campo para ver por última vez a los futbolistas de La Roja, que han pasado como una exhalación por la ciudad, casi sin detenerse con los seguidores que les han arropado durante estos días. Cazorla fue el futbolista más cercano. Firmó autógrafos y se hizo fotos con los más pequeños. El resto se subió directamente al autobús de Alsa.

No hubo pitos a Piqué. La gente respaldó al central del Barça e incluso pudo verse alguna camiseta con su nombre. También le apoyó Cesc Fábregas, que compareció en sala de prensa junto a Juan Bernat. El centrocampista del Chelsea quitó hierro al asunto y reclamó la unidad de todos “para volver a hacer historia”.