Froome se luce en el Dauphiné a tres semanas del Tour

El británico Chris Froome, del equipo Sky, ha dado este domingo un golpe de autoridad en el Dauphiné, con un triunfo en solitario en la octava y última etapa que le ha valido la victoria en la general, lo que supone un claro aviso cara el Tour de Francia, que empieza el 4 de julio. El estadounidense Tejay Van Garderen se ha dejado el liderato en los dos últimos kilómetros. Tercero ha sido el portugués Rui Costa, y cuarto, el español Beñat Intxausti.

A diferencia de otras carreras largas, el Dauphiné no ha dado tregua a los corredores ni siquiera en la última jornada, 155 kilómetros entre Saint Gervais y la estación de Modan Valfrejus. Froome, vencedor también en la jornada anterior y en la edición del 2013, ha invertido 3 horas, 59 minutos y 27 segundos en el último trayecto. El segundo ha sido el también británico Simon Yates a 18 segundos, el mismo tiempo que ha invertido el líder en la salida, Van Garderen.

Media docena de puertos

La etapa ha sido un calco de las anteriores, aunque un poco más suave, con una nueva exhibición de Froome y el equipo Sky a lo largo de media docena de puertos (uno de cuarta, dos de segunda, dos de tercera y el final en uno catalogado de primera), incluida la subida a Modane de Valfréjus, donde estaba la última meta con ocho kilómetros de ascensión y desnivel medio del 5,7%.

Un perfil nuevamente de serrucho y ataques desde el primer momento hasta que se ha formado la escapada del día hacía el kilómetro 25, cuando quedaban al frente de carrera 10 corredores: Kelderman (Lotto-Jumbo), Izagirre (Movistar Team), T.Martin (Etixx), Pires (Tinkoff-Saxo), Gautier, Quemeneur, Sicard (Europcar), Timmer (Giant), Smukulis (Katusha) y Cummings (MTN).

Los escapados han llegado a tener hasta cuatro minutos de ventaja, pero la falta de entendimiento, los tirones en el grupo principal y el fuerte ritmo que, como en etapas anteriores, ha vuelto a imponer el Sky ha han neutralizado a los corredores que iban por delante, excepto al alemán Tony Martín, que se ha quedado solo a falta de unos 60 kilómetros para la cúspide de Valfréjus, pero al final también ha sido alcanzado.

Valverde, de los más activos

El Sky ha endurecido más la carrera a medida que se acercaba la meta, pero Van Garderen ha seguido su estela y otros ilustres como Alejandro Valverde, Vincenzo Nibali y Joaquím 'Purito' Rodríguez se han han dejado llevar tras el varapalo sufrido en la jornada anterior dando por bueno lo sucedido en la carrera preparatoria para el Tour. En la parte final, Valverde ha sido uno de los más activos al salir del grupo principal en un par de ocasiones, pero sin éxito. El Astana, con el propio Nibali en labores de gregario, no ha consentido la fuga del español.

En el último ascenso ha muerto la aventura del británico Cummings (MTN), que durante muchos kilómetros ha ido a la cabeza de carrera. La batalla ha comenzado donde estaba previsto, en las primeras rampas del Valfrejus, y como se esperaba el duelo ha sido entre Froome y Van Garderen. El ataque del británico, como el día anterior, solo ha hallado respuesta en el líder, pero a medida que se acercaba la cima ha tenido que conformarse con mirar desde lejos el sillín del británico.

Como en otras ocasiones, el Dauphiné ha servido para comprobar el estado de forma de los aspirantes al podio del Tour. Froome con su exhibiciones en Mont Blanc y Valfrejus ha dejado claro que se encuentra en un excelente momento de forma, lo mismo que Van Garderen que, aunque no ha ganado, ha aguantado las embestidas. Nibali --vencedor del último Tour-- Valverde y Rodríguez han dejado claro que están algo más retrasados en su puesta a punto.