Alonso esquiva la sanción

«Los mecánicos me han resucitado a tiempo», escribía el ‘community manager’ que está detrás de la cuenta de Twitter de ‘Mariano PU14’, la unidad de potencia Honda con la que Fernando Alonso competirá este fin de semana en su McLaren. Los mecánicos de la escudería británica tenían una premisa cuando llegaron a Silverstone: el español tenía que esquivar la sanción por montar una unidad nueva como fuera. Si tenían que rehacer un motor ya usado con piezas de otros, lo harían. Si tenían que echar horas de más, las echarían. A trabajo pocos les ganarán, aunque luego los resultados no sean los esperados. Fernando Alonso llevará en el GP de Gran Bretaña el mismo motor que le dejó tirado en el de Canadá, por culpa —oficialmente— de problemas en el escape en la vuelta 44. El piloto asturiano tuvo la mala fortuna de partir en el accidente con Kimi Räikkönen la unidad de potencia que estrenaban en Austria, y por la que ya habían sido penalizados con 25 posiciones. Cuando el monoplaza llegó al box, los mecánicos se encontraron con que estaba prácticamente inservible. Las peores noticias se confirmaban: iba a tener que montar otra unidad nueva en la siguiente carrera, con la consecuente nueva sanción. Otra carrera perdida, otro fracaso estrepitoso para McLaren, otro bochorno y, por si fuera poco, en Silverstone, ante miles de aficionados británicos. No podía ocurrir

Así que los ingenieros de Honda se pusieron manos a la obra y, revestidos del espíritu de Viktor Frankenstein, reensamblaron la unidad de Canadá con algunas otras piezas de otros motores inservibles en su conjunto, para ‘fabricar’ una nueva versión de ‘Mariano’.