fútbol. primera división
Sospechosos habituales
Piqué y Alves, centro de las críticas por la derrota del Barça en Vigo.
Cuando hay que analizar una derrota del Barça siempre aparecen sospechosos habituales como Dani Alves y Gerard Piqué, que a sus graves errores en dos de los cuatro goles del Celta añaden esa personalidad especial que provoca que siempre estén en el punto de mira de la opinión pública, tanto de la barcelonista como de la anticulé. Son campeones de todo —y muchas veces—, salen de una lesión y de una sanción larga, respectivamente, y sus espaldas son anchas para no desanimarse por las justas críticas.
Son un blanco fácil, pero el 4-1 de Vigo no tuvo sólo dos culpables. Fue una obra de arte del Celta y un desastre del equipo azulgrana en conjunto, también de los intocables Messi, Neymar y Luis Suárez o de los habitualmente fiables Mascherano, Busquest o Iniesta, por no hablar de canteranos que suelen sucumbir en estas citas tan exigentes como Sergi Roberto o Munir. Y no se puede olvidar también a jugadores de los que se cuestiona con oportunismo si tienen el nivel Barça como Ter Stegen o Mathieu. De los que jugaron en Balaídos se salva Rakitic, pero no por hacerlo bien, que su momento de forma deja mucho que desear, sino por entrar al campo el último.
Berizzo, de la escuela Bielsa, planteó pulsos individuales por todo el campo, una arriesgada guerra de guerrillas en la que el jugador que perdiera el pulso ante su rival iba a quedar retratado. Y en esos ‘uno contra uno’ salió victorioso el Celta porque está físicamente mejor, tiene más intensidad e, incluso en este momento puntual del curso, más ilusión.
El último partido de la jornada
Betis, 1 - Deportivo, 2