FÚTBOL. SEGUNDA DIVISIÓN
Imponente en El Toralín
La Deportiva vuelve a dar muestra de fortaleza en su estadio y suma una nueva victoria en su mejor partido de Liga.
El Toralín sigue siendo inexpugnable. Seis partidos oficiales se han resuelto con cinco victorias bercianas y un empate. Ayer, 4-2 ante el Real Oviedo en uno de esos encuentros que hacen afición por todo, pero que cada día se ven menos: gran ambiente, aficiones volcadas, intensidad, emoción, goles, buen juego por momentos... La Deportiva evita fantasmas y con un triunfo vuelve a acercarse a la zona alta, siembra confianza y consigue de nuevo crédito para que se crea en ella y para que si llega al fin un resultado triunfante fuera, el equipo se vuelva a situar en la zona de vanguardia de la clasificación.
Manolo Díaz optó por dejar de nuevo fuera del equipo inicial a Ignasi Miquel. La defensa de la Deportiva sufrió bastante con las embestidas del rival, sobre todo en el primer tiempo. Berrocal volvió a ser titular y con su gran partido, el mejor en lo que va de Liga a nivel personal y posiblemente colectivo, acalló las crecientes críticas sobre su aportación al juego del equipo, más cuando la gente se emociona con Jebor y forma impulsiva de actuar. Álvaro Antón volvió a la izquierda y en esta ocasión la pareja de mediocentros la formó Melero, que también hizo su mejor partido, recordando al de pretemporada, y Andy, que creció mucho respecto a Huesca, cosa que tampoco era muy difícil. En el Real Oviedo no fueron titulares ni Linares ni Borjina Valle. El primero entró en la segunda parte, pero el berciano no pudo hacerlo. La lesión de David Fernández y el cambio obligado que tuvo que hacer Egea lo impidieron. Y Toché no aportó lo esperado arriba.
El Real Oviedo entró mejor en el choque. Se puede decir que hasta la igualada de Berrocal fue superior. Marcó de penalti en una acción de mano de Pavón que convirtió Susaeta. El árbitro dio la ley de la ventaja, la acción acabó con una intervención de mérito de Santamaría y entonces volvió atrás, anuló todo y decretó la máxima pena. El navarro casi la para. Pero antes Koné había ganado la espalda a Alan Barró para gozar de una clarísima acción para el 0-1. La lanzó fuera. Hervías, un incordio por banda izquierda con sus diagonales al área, Toché y el propio Koné también tuvieron otras ocasiones antes del 0-1. Y cuando menos podía sospecharse que la Deportiva reaccionase, pues le estaba costando hilvanar juego y tener la posesión del balón, una jugada de estrategia cambió el partido. Saque de esquina muy pasado de Álvaro Antón más allá del segundo palo, Andy mete el balón de cabeza al corazón del área y Berrocal fusilaba a Esteban. El cuento cambiaba y el panorama también. Y más cuando seis minutos después un centro del cordobés lo remataba Yuri de tacón y el esférico daba en David Fernández, desviando su trayectoria y siendo imposible de alcanzar para Esteban. No obstante el 2-1 se lo concedió el colegiado al brasileño.
En la segunda parte la Deportiva fue mejor. Si en la primera mitad sólo había realizado dos tiros o casi uno y medio, y había tenido 100% de efectividad, en el segundo acto ya había lanzado a puerta cuatro veces (dos entre maderas y dos fuera) en los primeros cinco minutos. Melero tuvo una doble ocasión muy clara. El madrileño fue creciendo exponencialmente y el partido empezó a moverse al ritmo que marcaba él. La Deportiva recuperaba pronto, con una presión alta, y generaba peligro. Esto hizo que el público se viniese arriba, también espoleado por la remontada y por el pique con la hinchada rival para no verse superada por ésta en ánimos.
Egea no lo veía claro. Tras perder a Fernández, reforzaba el medio con Héctor Font y la punta con Linares. Johannesson, reemplazante del lateral lesionado, servía el empate a Hervías en su primera intervención, pero el ex realista fallaba.
El cuadro berciano seguía generando peligro. Álvaro Antón, con mucha movilidad en el choque, pero ayer de vuelta a la banda, mandaba al palo antes de que Hervías y David Fernández tuvieran otras ocasiones destacadas para el equipo carbayón.
Basha, Caiado y Jebor entraron en el último cuarto. El liberiano asistió al luso para que hiciese el tercero y el cuarto, el primer pase, casi sin querer tras elegir la peor opción en un contragolpe, y el segundo, de tacón, dejando Yuri pasar al estar en fuera de juego. Por medio otro penalti y la opción asturiana de meterse de nuevo en el partido, gozando incluso de la ocasión del 3-3.