FÚTBOL. PRIMERA DIVISIÓN
Busquets tiene la clave
Sin Xavi ha asumido la defensa de la esencia del Barça y se ha convertido en el nexo de unión entre todos los estilos.
Su nombre no ha sido coreado casi nunca en el Camp Nou, apenas ha recibido ovaciones de sus propios aficionados, no aparece en la lista de precandidatos al Balón de Oro ni mucho menos en la de finalistas, es alérgico a las redes sociales aunque ello le cueste repercusión mediática, los periódicos nunca piensan en él para las portadas, lo suyo no es el gol, sus pocas declaraciones no son altisonantes y ha domado un instinto de futbolista callejero que le metía en algún lío al inicio de su carrera. Así es Sergio Busquets. «El mejor centrocampista del mundo, mi debilidad. Lo hace todo bien», según manifestó el pasado sábado Fran Escribá, estudioso entrenador del Getafe. Así es el futbolista de Badia del Vallès (Barcelona), el hombre que hizo «un partido perfecto» ante el BATE Borisov, según proclamó Luis Enrique, poco dado al piropo individual.
Todos los entrenadores destacan la figura de Sergio Busquets por su inteligencia táctica, por saber elegir siempre la mejor opción de pase, por su sacrificio individual en beneficio del colectivo, por su capacidad para robar balones, por ordenar la presión avanzada y lograr que todos sus compañeros le obedezcan, lo mismo cuando toca replegarse. Pep Guardiola y Vicente del Bosque confesaron en su día que si se reencarnaran en un futbolista les gustaría ser Busquets. Cosas de excentrocampistas, dirán sus detractores, que, como sucede en todo en la vida, también los hay aunque lo haya ganado todo con el Barça y con la selección. Su aspecto físico, desgarbado, poco elegante cuando corre, debe penalizarle para ese sector.
Busquets ya fue vital para el Barça de Guardiola y la selección de Del Bosque en dos sistemas futbolísticos que le iban como anillo al dedo por sus características: toque, posesión, fútbol más estático. Pero el estilo con Luis Enrique ha evolucionado, sin renunciar al control, hacia un juego más vertical que exige más recorrido. Y Sergio Busquets, por encima incluso de los cracks que logran los goles, quienes al fin y al cabo hacen lo de siempre, se ha convertido en el nexo de unión entre todos los estilos, incluso asumiendo más liderazgo por su capitanía.