De ‘Nobleza y Garra’ se hacen los mejores Fierro

Leoncio García no pudo estar en Boñar; su esposa está pasando malos días y esa pareja entrañable que puso en marcha hace cuatro años uno de los premios más hermosos de la Lucha, en honor y recuerdo a su heroico hermano, Chuchi el de la Ercina, no pudo disfrutar de la entrega del bronce de Iribertegui con el que se reconoce al ganador en Nobleza. Lo fue, por segundo año consecutivo, «Rubo» Fierro, de Boñar, pero de Valdorria. Y para que la jornada fuera inolvidable a pie de Negrillón, junto a quien los aficionados han vuelto a reconocer como más noble entre los nobles, a su lado, su hermana, Laura, recibía el primer Premio Diputación a la Garra en la Lucha Leonesa Femenina.

Tiene catorce años, es de las más pequeñas y menudinas, pero, al igual que la afición, sus compañeras hablan de su grandeza luchadora, de su garra. «En la lucha hay que atacar», así de sencillo. Hace suyas Laura las palabras de su hermano cuando el año pasado recibió por primera vez el Trofeo a la Nobleza: «Me hace más ilusión que una Liga. Te sientes más querida por el público, que es el que te vota. Y va a ser más recordado que una liga, yo creo».

Rubén quiere agradecer a esa afición su querer, que la gente vote «porque entiende que luchas bien, vas al ataque y además no te saquen una tarjeta», y, dice, que intentará hacerlo igual, o mejor si puede. En verdad, tras sus dos años consecutivos, y dada su juventud, él tiene muchas posibilidades de hacerse con el bronce del dominico navarro-leonés en propiedad (lo que se establece en las bases del premio para quien lo conquiste tres veces). Los dos señalan que su lucha viene de lo que aprendieron en Campohermoso, y que ese espíritu se mantiene e incrementa en Valle del Curueño con Ibán. Y los dos, nos hacen notar que hay un serio problema en el futuro inmediato: faltan juveniles... se va a notar pronto. ¡Tan pronto!