El Barça pasa el rodillo

El primer envite entre Barcelona y Cangas estaba sentenciando de ante mano. El único aliciente era saber cual sería la diferencia final, que se quedó en trece (34-21) y porque los azulgrana, pese a que jugaron con su eficacia habitual, no pisaron a fondo el acelerador. A los cinco minutos el partido ya estaba roto con un 5-1 marcado por los cañonazos del lateral azulgrana Jallouz. Enfrente el Cangas oponía su mejor voluntad, su dignidad como equipo y el acierto de su lateral Rosales, que con sus goles intenta mantener a los gallegos a una distancia aceptable del conjunto azulgrana.

Pero el todopoderoso equipo catalán comenzó a marcar distancias desde los primeros minutos para dejar claro que son los actuales campeones del torneo y que en León, hoy domingo, quieren sumar su quinto título consecutivo del torneo copero. Un nuevo hito histórico que añadir a su larga lista.

Jallouz, el lateral tunecino que obligó a Rutenka a hacer las maletas se encargaba desde sus dos metros de altura de martillear la portería de Salazar repetidamente. Seis de seis firmó el nortafricano en la primera mitad.

Mientras, a los gallegos les costaba un mundo perforar la muralla defensiva de los catalanes (el desequilibrio físico de kilos y centímetros) era evidente y cada vez que veían un resquicio se encontraban con un enorme Danjel Saric que volvió a exhibir en el Palacio todo su amplio catálogo de paradas.

El técnico gallego, Víctor García ‘Pillo’ se veía obligado a pedir un tiempo muerto con un rotundo 18-8 en el marcador que lo dejaba ya todo sentenciado, pocos instantes antes de irse al descanso con 19-10. El segundo tiempo no tuvo ninguna historia. El Barcelona exhibió rodillo y fondo de armario y el Cangas voluntad para acabar lo menos apalizado posible. El Barça calentó motores para la final de hoy ante el Naturhouse a las 16.45 horas.