Y otra vez, León

D e nuevo, y ya van muchas ocasiones, León demuestra que quiere balonmano y que apoya todo lo que tenga que ver con nuestro noble deporte. Este pasado sábado las ‘Guerreras’, la selección nacional femenina vino a la capital a disputar su partido, importante que no decisivo, frente a Holanda. Durante la semana, el precedente venía en forma de derrota por diez goles en casa de las autodenominadas tulipanes.

El partido tuvo dos partes bien diferenciadas, en la primera España rozó la perfección y con los goles de Barbosa y las paradas de Navarro se conseguía casi igualar la diferencia del anterior partido entre semana. Al descanso eran nueve para las nuestras. En la segunda mitad, la situación cambió, Holanda dejó de perder balones que provocaban los contraataques de las guerreras y poco a poco bajó la renta, hasta que al final la victoria se quedó en casa y aunque no se logró voltear los guarismos, si que se dio una imagen mucho más acorde con lo que es la selección. Pero de lo mejor del partido, fue de nuevo la gente, nuestra gente, nosotros. León se volcó con el balonmano de nuevo, y pese a que el sábado a la una del mediodía no es el mejor horario para un partido de esta calidad, una gran entrada se pudo ver en el Palacio, ese ya mítico lugar donde cualquier aficionado no sólo al balonmano, sino al deporte, conoce.

Como en las Copas Asobal, como en la final a cuatro de la del Rey, como contra Alemania hace un año, como con las guerreras, como pasará en los partidos decisivos de nuestros equipos o como a buen seguro veremos en el Mundial Júnior que vendrá. León es símbolo de éxito organizativo para el balonmano, y la federación y Asobal lo saben. De esto, la culpa es nuestra, sintámonos orgullosos. Ademar también consiguió su objetivo, pasar a la fase final de la Copa del Rey, con cuatro acompañantes de la calidad del Barsa, Anaitasuna y Logroño. No sabemos quien la organizará, pero si es en León, volveremos a ser los protagonistas todos nosotros, sin duda.