FÚTBOL. LIGA DE CAMPEONES
Madrid y Atlético se citan en Milán
Los blancos se cruzarán antes con el City y los de Simeone, con el Bayern.
ignacio tylko | nyon
La mano inocente del serbio Dejan Stankovic, ex jugador del Inter, extrajo las bolas en el sorteo de ayer en la sede de la Uefa en Nyon (Suiza) y determinó unos emparejamientos desbordantes de interés que permiten soñar con que Milán albergue el próximo 28 de mayo la tercera final española en la Liga de Campeones, tras las ganadas por el Real Madrid al Valencia (3-0) el año 2000 en Saint-Denis, y al Atlético, hace dos temporadas en Lisboa (4-1).
A priori, la fortuna sonrió de nuevo el equipo dirigido por Zinedine Zidane, que se medirá al Manchester City, un nuevo rico que se estrena en penúltima ronda y era el adversario más deseado por los merengues, que, además, jugarán la vuelta en el Santiago Bernabéu. Y la mala suerte persiguió al Atlético, que tras desembarazarse del Barça, vigente campeón, chocará contra el poderoso Bayern de Múnich de Pep Guardiola, que busca despedirse del club bávaro con esa ansiada Champions para la que es máximo candidato en las apuestas. Los colchoneros jugarán la vuelta en el Allianz Arena. Ambos equipos españoles cumplieron el deseo de no medirse entre ellos.
El duelo entre ‘citizens’ y merengues mide a Manuel Pellegrini frente a ‘su’ Real Madrid. El ingeniero chileno clama venganza contra un equipo del que se marchó por la puerta de atrás después de protagonizar la campaña, hasta esa fecha, con más puntos en Liga (96). Sin embargo, su pronta eliminación en Champions y el célebre ‘Alcorconazo’ copero, provocaron su adiós. En 2012, City y Real coincidieron en el grupo de la muerte junto al Borussia Dortmund y el Ajax. El Madrid de Mourinho se impuso 3-2 en el Bernabéu y el conjunto de Roberto Mancini igualó en el Etihad (1-1).
Mientras, el duelo ante el Bayern revivirá momentos dramáticos para los veteranos atléticos. Les sobrevolará el fantasma de Schwarzenbeck y de ese gol que igualó al de Luis Aragonés en el último minuto de la prórroga, en aquella final de Heysel en 1974. En el partido de desempate, que se jugó sólo dos días después, la máquina bávara pasó por encima del Atlético. A partir de ahí, la Uefa cambió el sistema y decidió que habría penaltis si el tiempo extra concluía en tablas.
Se prevé un choque de estilos y un duelo táctico maravilloso entre Guardiola y Simeone, técnicos que construyen equipos de autor. El Bayern sufrió en octavos ante la Juventus (2-2 en Turín y 4-2 en la prórroga del Allianz Arena) y en cuartos algo menos ante el Benfica (1-0 en Múnich y 2-2 en Da Luz). Son un equipo de larguísimas posesiones, pero con problemas en defensa. Similar al Barça. No les ha sentado muy bien cruzarse con el Atlético.