«Somos muy ambiciosos»

sergio c. anuncibay | león

El Abanca Ademar tiene «muchas ganas de competir» el próximo fin de semana en la ‘final a cuatro’ de la Copa del Rey, donde les espera en semifinales el Barcelona, un rival muy superior en todas las facetas del juego, pero que deberá esforzarse al máximo si quiere levantar su enésimo título en España.

«Tras la victoria contra el Naturhouse llegamos con muchas ganas a este torneo. Está claro que va a ser muy difícil, pero porqué no podemos ganarles. Vamos a salir como hemos hecho en los últimos partidos para intentar hacerles el mayor daño posible». Diego Piñeiro confía plenamente en la capacidad del equipo para inquietar a un Barcelona al que ningún conjunto de Asobal ha vencido en los últimos tres años.

Es prácticamente una misión imposible, pero ninguno de los jugadores, tampoco el cuerpo técnico, se ha querido poner la venda antes de la herida. Todo lo contrario. «Somos muy ambiciosos y queremos estar lo más arriba posible», explica el pivote gallego, convencido de que si muestran su mejor versión podrán «plantarle cara al Barcelona», como ya hicieron en el encuentro de Liga en el Palacio, «cuando ellos tuvieron que apretar mucho al final para llevarse la victoria después de ir todo el rato por detrás en el marcador. Estuvimos ahí», recuerda.

Piñeiro cree que van «sin mucha presión» a la Copa del Rey, después de haber hecho los deberes en la competición doméstica. La clasificación virtual para Europa es un hecho. «Era nuestro objetivo y prácticamente lo hemos cumplido ya, aunque somos ambiciosos y queremos meterle mano al Barça», reiteró el jugador gallego, quien ve al Abanca Ademar en el mejor momento de la temporada, mucho más maduro y regular, a pesar de la baja de Fede Vieyra, una de las piezas más importante de todo el engranaje. «Aunque somos una plantilla joven hemos reaccionado muy bien a la ausencia de Fede, el único lateral derecho que tenemos y eso se nota en el juego. Hemos sacado partidos muy importantes», asegura.

Además, el tiempo les ha dado ese poso que necesitaban como equipo para ser más consistentes. En ese sentido, reconoce que en la segunda vuelta han dado un paso al frente. «En la primera no nos conocíamos y era más difícil conectar. Ahora estamos dando alegrías a nuestra afición y eso es lo más importante», celebra.

Si bien, ni él ni el resto de la plantilla se conforman con lo hecho hasta ahora. Pretenden mantenerse en ese cajón de bronce que ocupan actualmente y competir hasta el final con el Barcelona este sábado, sin renunciar a dar la campanada. «Todos hubiéramos firmado al principio llegar a estas alturas en la tercera plaza y metidos en la final de la Copa. Nos merecemos acabar terceros después de haber ganado los dos enfrentamientos a Granollers y el partido contra Naturhouse del Palacio. Daremos lo máximo para defender esa posición», asegura.