Cinco años con la blanquiazul

Alan Baró llegó a la Deportiva en el verano de 2011 procedente del Albacete, con el que acababa de descender a Segunda B. En su primera temporada en el equipo berciano, el central catalán fue uno de los pilares del conjunto que logró el ascenso a la Liga Adelante en Tenerife, y desde entonces fue un fijo tanto para Claudio Barragán como para José Manuel Díaz en las últimas cuatro temporadas en la categoría de plata.

Durante este tiempo, Alan se ha ganado a la afición deportivista a base de pundonor, demostrando su capacidad de adaptación a varias posiciones fuera del centro de la zaga, ya que en no pocas ocasiones le tocó actuar en el lateral e incluso, como ocurrió durante la nefasta etapa de Fabri en el banquillo, como mediocentro. Ahora, el de Darnius medita su continuidad en el club para buscar otro ascenso.