«Aquel gol cambió a la Deportiva»

álex estébanez | ponferrada

El 25 de junio de 2006 es una fecha grabada a fuego en la historia de la Deportiva. Ese día, hace exactamente diez años, un gol de Fran en el Rico Pérez de Alicante enviaba a la Ponferradina a Segunda División después de una durísima fase de ascenso en la que se deshizo del Universidad de Las Palmas y del Alicante, a pesar de partir como cuarto clasificado de su grupo.

«Todo el mundo nos daba por eliminados en la primera ronda», reconoce diez años después el autor del gol más recordado de la Deportiva, «nadie nos veía capaces de eliminar ni siquiera a la Universidad de Las Palmas».

Pero lo hicieron. En una eliminatoria marcada en la ida por el gol de Chupri desde el centro del campo: «El partido se había parado porque lanzaron algo al línea desde la grada. Chupri se la tira a su portero para devolverles el balón, pero se come el bote y nos encontramos con ese gol. Si lo piensas, es para que se hubiera montado un barullo importante, pero creo que nadie tenía claro quién tenía que sacar y pasó desapercibido».

El barullo se montó en la vuelta, con los jugadores del Universidad de Las Palmas desencajados e incapaces de asimilar su eliminación: «Se calentó el partido con el tema de las entradas, las declaraciones de Paulino diciendo que éramos un equipito... Fue muy duro, porque además hacía un calor horrible, pero el gol de Ramón (Pereira) nos dio tranquilidad. Luego se lió con las agresiones y parecía que se iba a suspender, pero el árbitro dijo que se jugaba».

Superada la primera ronda, esperaba el Alicante en la final. En la ida, la Deportiva se adelantó con un penalti de Diego Ribera, pero un tanto de Marcos Estruch en el descuento ponía el ascenso en bandeja a los levantinos: «Ese gol nos dejó tocados», confiesa Fran, «pero nos quedamos con el detalle de que ellos estaban después del partido cantando y bailando en el autobús. Parecía que ya se veían ganadores».

¡Gol de Fran!

En el Rico Pérez las cosas no empezaron bien para la Deportiva: «Tuvimos suerte, como en toda la liguilla, porque en la primera parte tuvieron ocasiones para irse 3-0 al descanso fácilmente, pero en la segunda cambiaron las tornas: nosotros nos lo empezamos a creer y ellos cada vez reculaban más».

Y llegó el minuto 86. «Pereira cogió el balón con velocidad hacia la portería y le cazaron. Había dos posibilidades: centrar al área o hacer lo que hicimos, y desde el banquillo le dicen a Diego que me la pase. Uriz se queda algo despistado en la frontal y, por suerte, se gira para el lado bueno. Cuando vemos que entra el balón nos volvemos todos locos, celebrando cada uno por su lado. No sé ni con quién lo celebré. Los últimos minutos se hicieron eternos».

Fran reconoce que «aquel gol cambió a la Deportiva. El club empezó a sentirse importante en Segunda y ahora todo el mundo del fútbol sabe quién es la Ponferradina. Estar seis años de diez en Segunda era impensable en 2006».