Las Guerreras no perdonan a Brasil
España da un paso definitivo hacia los cuartos de final y certifica su condición de aspirante a las medallas Silvia Navarro levantó un muro infranqueable.
javier villanueva | río de janeiro
La selección española femenina de balonmano dio un paso decisivo hacia los cuartos de final del torneo olímpico, tras imponerse por 24-29 a Brasil, gracias a una sobresaliente actuación de la guardameta Silvia Navarro.
La portera española, que llegó a rozar por momentos el 60 por ciento de paradas en el primer tiempo, se convirtió en un muro infranqueable para las brasileñas.
Un muro sobre el que se sustentó toda la estructura de un equipo español, que volvió a demostrar su condición de aspirante a todo, tras desarbolar durante muchos minutos a una selección brasileña que se había mostrado hasta ahora imponente en el torneo.
Las de Jorge Dueñas anularon una a una todas las virtudes que habían permitido a Brasil no sólo ganar todos sus partidos, sino en algunos casos como en el de Rumanía, un equipo que concluyó tercero en el pasado Mundial, apabullar a sus rivales.
Pero España no estaba dispuesta a dejarse arrollar por la anfitrionas y menos la guardameta Silvia Navarro, que ayer se volvió a mostrar como esa eléctrica portera capaz de llegar a parar cualquier balón por imposible que parezca. Una soberbia actuación que contagió al resto de sus compañeras.