Diario de León

Camponaraya hace oro del bronce de Lidia

La deportista berciana recibe el reconocimiento y el cariño de su gente tras lograr el podio olímpico Cerca de 1.000 personas se dieron cita en el homenaje a su ilustre vecina.

Lidia recorrió la Plaza del Ayuntamiento junto al alcalde en loor de multitudes y con la caja en la que guardaba la preciada medalla en la mano. ANA F. BARREDO

Lidia recorrió la Plaza del Ayuntamiento junto al alcalde en loor de multitudes y con la caja en la que guardaba la preciada medalla en la mano. ANA F. BARREDO

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francisco otero | camponaraya

Lidia Valentín recibió el cariño y el calor -por si hacía poco- de sus paisanos, de su gente de Camponaraya. Aún no ha pasado ni tan siquiera una semana desde que lograse la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, aún no se han apagado los ecos a nivel nacional de tan magna hazaña para la halterofilia de nuestro país, y Lidia ya está entre los suyos.

«¿Podremos hacernos una foto con ella?», decían muchas personas que se congregaban en la Plaza del Ayuntamiento de Camponaraya, sumando cerca de un millar. Entre ellas estaba Nuria Lugueros, atleta berciana que sueña con estar un día en unos Juegos Olímpicos y que ayer era confirmada como pregonera de Cima 2016, o María Emma López Crespo, llamada por muchos a ser la sucesora de su amiga en la cúspide del deporte de las pesas en nuestro país. También Diego Vázquez y su gente de Bierzo Fitness u otros deportistas ya menos conocidos, pero que desarrollan su actividad con igual dedicación e ilusión, como jugadoras del CD Ponferrada.

Pasadas las 19.30 horas la rubia levantadora de pesas hacía su aparición en la plaza del pueblo. Allí le esperaba la gente que se arremolinaba para verla de cerca. Lidia se mostró sorprendida de ver tanta gente. El alcalde, Eduardo Morán, hacía de maestro de ceremonias, y los más afortunados se hicieron con un sitio en el salón de plenos para escuchar los parlamentos. Tanto es así que la madre de Lidia tuvo que colocarse atrás del todo para ver orgullosa de cerca a su hija, heroína local y comarcal.

Los alumnos de la Escuela Municipal de Halterofilia y la propia María Emma López hicieron un pasillo de honor a Lidia para acceder al Consistorio en medio de la ovación del pueblo y flanquearon a la medallista olímpica durante los minutos que estuvo sentada en el sillón presidencial de la Sala de Juntas.

El alcalde también estaba orgulloso. Nadie en España puede presumir de tener a una haltera medallista ni nadie lo ha podido hacer antes de ahora. Y su discurso estuvo centrado más en la Lidia persona que en la Lidia deportista. Morán destacó el compromiso de la deportista con Camponaraya, cuyo nombre pasea orgullosa por el mundo, como el de la comarca berciana y a la que acude siempre tras una gran competición a compartir con sus gentes sus logros o sus penas; casi siempre lo primero. Lidia se emocionó y eso que ya tiene tablas y experiencia en este tipo de recibimientos. Bueno, no, en este tipo no, porque el de ayer fue diferente a los muchos de los que ya ha sido objeto en estos años de exitosa carrera deportiva. Porque nunca hubo tanta gente acompañándola, porque nunca vino con una medalla olímpica y porque nunca tuvo que pasarse horas firmando autógrafos y haciéndose fotos con sus vecinos, esos que hace años la veían por la calle y sólo sabían que era la hija de Luis y Estrella y que no se explicaban muy bien cómo se dedicaba a levantar pesas.

«Quería agradecer a todas las personas que han venido a recibirme y al pueblo que se ha volcado siempre conmigo, en particular el día 12 mientras estaba en la competición. Sabía que iba a estar apoyándome y eso me dio mucha más fuerza y motivación para hacer una buena actuación. Estoy muy agradecida y feliz. Siempre que acaba un evento de este tipo me gusta venir a celebrarlo a mi tierra con mi gente. Ha sido un día muy especial desde la mañana, en la que el Ayuntamiento me ha llamado para plantearme varias cosas, con el recibimiento de Isaac Álvarez, mi primer entrenador, y el de mi pueblo y familia. Estoy en deuda con todos vosotros y he traído la medalla para poder enseñárosla. No sabía que iba a mover a tanta gente y esto aún me hace más feliz». Fueron las palabras de Lidia Valentín, que a continuación sacó de su caja la presea, que pesa bastante según dijo, y se la mostró a todos los presentes en el acto.

Por su parte, Morán habló, como habíamos apuntado, de la figura de su más ilustre vecina: «Era obligado hacer este tipo de reconocimiento y recibimiento formal e informal en la calle. Todos sabéis de los merecimientos de Lidia, no sólo de esta medalla de bronce ganada en Río de Janeiro, sino también los de toda su carrera de 15 años desde que abandonó Camponaraya y los cuatro años anteriores en nuestra escuela. Dejó lo mejor de su juventud para dedicarse al deporte profesional con el sacrificio que ello supone, pero ha merecido la pena. El día 12 obtuvo una medalla de bronce y unos días antes tuvimos la noticia de algo que injustamente le habían robado. Ni eso ni la lesión le frenaron y nos ha traído una alegría a Camponaraya y al Bierzo. En todos estos años siempre ha tenido la delicadeza de venir después de las pruebas al pueblo y ha llevado el nombre del municipio por el mundo. Eso nos hace estar en deuda con ella y en breve tendrá su reconocimiento institucional».

Tras el acto más formal, Lidia salió a la puerta del Ayuntamiento de Camponaraya y habló ante los presentes. Vino a reflejar un poco lo que había dicho instantes antes, volviendo a señalar su emoción y su sorpresa por la masiva acogida de su persona a su regreso de Brasil y el agradecimiento por el seguimiento plasmado sobre todo en las personas que acudieron a ver su competición el pasado viernes a la pantalla gigante instalada en el recinto ferial.

El Ayuntamiento montó una pequeña fiesta en la plaza levando incluso a la Orquesta Compostela para la ocasión, lo que llevó a los más despistados a preguntarse si este año se habían adelantado las Fiestas de Camponaraya. No eran las de La Soledad, pero Lydia sí que llevó otras fiestas a su pueblo.

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