«Hay que mirarles a los ojos»

A Rubén de la Barrera no le quita el sueño la eliminatoria contra el Real Madrid. Ni le asusta el potencial de uno de los mejores equipos del mundo. Sabe que será «tremendamente difícil» sorprender al actual campeón de Europa en el Reino, pero no renunciará al estilo que ha empujado a la Cultural hasta el primer puesto del grupo.

Tira de ambición. «Lo que todos tenemos en la mente es competir», explicó ayer el técnico, quien ponderó las evidentes diferencias que existen entre las dos plantillas, aunque eso no hace que esconda la cabeza bajo tierra. Tampoco asume el papel de víctima. «He pedido a mis jugadores que miren a los ojos al rival», subrayó De la Barrera durante la rueda de prensa previa al encuentro, más concurrida de lo normal.

Ni él ni los futbolistas quieren ser convidados de piedra frente a la constelación de figuras que pisará hoy el Reino. No estará la BBC, pero «vienen jugadores que conocemos todos, que son internacionales y han escuchado el himno de la Champions», valoró el técnico.

Advirtió además que para tener alguna opción deben minimizar al máximo cualquier error. Es consciente de que los contraataques del conjunto blanco son letales. «Si ante el Madrid pierdes el balón ya sabemos lo que ocurre», avisó el entrenador gallego, que no cambiará la propuesta que ha sostenido en las diez primeras jornadas. También en los tres compromisos de la Copa. «Si no hacemos nuestro juego, el partido se nos hará largo. Podemos crear incertidumbre en el Real Madrid y podemos hacer que se sientan amenazados», aseguró.

Eso sí, reconoce que les «tocará sufrir» ante un rival muy superior, que debería imponerse con facilidad si los análisis se apoyan sólo en la lógica. El actual campeón de la Champions contra un equipo de Segunda B que pretende dar un paso importante esta temporada. La distancia, de momento, es sideral.

Por eso De la Barrera espera que este enfrentamiento contra el Madrid sirva para «crecer». Quiere que los futbolistas «disfruten» sobre el terreno de juego, sin complejos. Plantea el doble compromiso como «una eliminatoria» y repartirá los minutos entre el mayor número de jugadores posible. El principal objetivo que plantea el técnico de la Cultural es mantener el cruce abierto hasta el encuentro del Santiago Bernabéu, el próximo 30 de noviembre.

«Tendremos situaciones de ventaja y el resultado dependerá en cierta medida de que las sepamos aprovechar, pero si nos equivocamos media vez este equipo te mata», reiteró De la Barrera, quien calificó como «una fiesta» para León la visita de Zidane y compañía al estadio municipal. Aunque él lo vivirá de forma diferente, sobre todo cuando arranque el compromiso. «Será una fiesta hasta que empiece a rodar el balón. A partir de ahí intentaremos ganarles. No voy a aplaudir los goles del Madrid», destacó el entrenador de la Cultural, quien confía en que puedan marcar algún tanto frente a un contrincante con muchos más recursos.

Tanto él como la plantilla tienen «ganas» de que lleguen las nueve de la noche. A partir del jueves, ya habrá tiempo de pensar en la Liga, lo más «importante». Tras la visita del Madrid, tendrán que desplazarse el sábado al Sardinero para enfrentarse al Racing.