GRAN PEMIO DE VALENCIA
Lorenzo quiere dejar Yamaha en lo más alto
El tricampeón mellorquín de MotoGP logra su 'pole' nº 65, por delante de Márquez, tras una gran exhibición
Aunque está lleno de rabia y no lo dirá (a nadie), Jorge Lorenzo solo tiene una aspiración este fin de semana: abandonar Yamaha, irse de Yamaha, huir de Yamaha ganando. Aunque está lleno de dolor porque la marca japonesa lleva años prefiriendo a Valentino Rossi, su estilo, su marca, su marketing y su tribu, a las victorias y títulos mundiales que él le ha proporcionado, Lorenzo ha escrito en la cúpula de su M1 un bello #ThanksYamaha, porque así lo siente. Lorenzo, que ha invitado a su abuela Ignacia Guerrero a Cheste (Valencia) para que le vea ganar, digo, debutó con Yamaha, en Catar-2008, con una ‘pole position’ y hoy, ocho años después en un Cheste repleto de fans, ha logrado su ‘pole’ 65, empatando con Marc Márquez (Honda), que, cómo no, ha sido segundo.
FINAL FELIZ
Lorenzo lleva años, viernes, sábado y domingo pensando en azul. Ya tendrá tiempo, el lunes y los dos próximos años, de ilusionarse con el rojo de Ducati y Marlboro. Poco, o nada, le importa que el ‘Doctor’ le haya arrebatado el subcampeón de este año, él, el tricampeón de Yamaha, quiere irse ganando, en lo más alto del podio, vitoreado por su público y, tal vez, sí, por qué no, pitado por los ‘rossistas’ pues, como lamenta Márquez, el ‘hooliganismo’ ha llegado a las motos.
Lo que Lorenzo ha hecho hoy en Cheste (Valencia) hacía mucho tiempo, demasiado, que no se veía en el Mundial y, durante los últimos años, solo ha estado al alcance del ‘tri’ mallorquín y del nuevo ‘tri’ catalán, Marc Márquez: dar tres vueltas rápidas, tres ‘poles’, en tiempo récord, superando el crono del año anterior. Así ha empezado a despedirse Lorenzo de Yamaha, harto del trato recibido, harto de ser el segundo en casi todo, menos en la pista. El récord de Cheste de MotoGP era suyo (1.31.367 minutos, del 2015) y Lorenzo ha parado el crono cada vez mejor: 1.29.849 en su primer juego de neumáticos; 1.29.613 en el segundo y, al final, 1.29.401, 0.340 segundos mejor que Márquez, que ha roto la barrera del record en dos ocasiones.
SEGUNDA FILA AGUERRIDA
Lorenzo partirá mañana, ante 110.000 aficionados, lleno absoluto, récord total, acompañado en primera fila por Márquez y Rossi, que se ha quedado casi a un segundo (0.727 segundos) del mallorquín. La segunda fila será para Maverick Viñales (Suzuki, a 0.875), Andrea Dovizioso (Ducati, a 0.937) y Pol Espargaró (Yamaha, a 0.991). “¡Uf! ¡cómo han corrido estos dos!”, musitó ‘Polyccio’ en el ‘corralito tras su gesta.
“No entiendo nada, cada vez que salía me sentía mejor, cada vez que lo intentaba rodaba más y más rápido, de verdad, no lo entiendo, pero soy muy feliz, sí”, reconoció Lorenzo ante el micrófono de Izaskun Ruiz, de Movistar TV, en el ‘corralito’ del trazado valenciano. “Debe ser la adrenalina, las ganas de correr, de que todo salga bien y, sí, claro, de intentar ganar, pero estos cronos eran inimaginables al empezar la última sesión”.
ROSSI, MÁS LENTO
Lorenzo, como Márquez, están convencidos de que la carrera de mañana (14.00 horas, Tele-5 y Movistar TV), será otra cosa aunque, como reconocieron ambos, los tiempos de la ‘quali’ sí reflejan que ambos están listos para pelear por la última victoria, en el cuarto gran premio de casa. “En ritmo, con neumático de carrera, creo que no estamos tan lejos de Jorge”, explicó el tricampeón de Cervera (Lleida), que reconoció la enorme velocidad de Lorenzo en las tres vueltas rápidas que ha protagonizado. “En el último entrenamiento largo antes de la ‘quali’ ya me he caído porque estaba forzando, sabedor de que la ‘pole’ iba a ser casi misión imposible, pero me siento listo para pelear con Jorge en carrera”.
Y, como casi siempre, aunque a casi un segundo de los dos grandes favoritos aparece, cómo no, el gran Valentino Rossi, que nada más colocarse ante el primer micrófono que encontró mostró su sorpresa porque “¡uf!, estos chichos han ido hoy muy rápidos”, en clara referencia a los dos ‘magnífico’, Lorenzo y Márquez. “Salir en primera fila era el primer gran objetivo; el segundo, arrancar bien, pues, detrás, tengo una jauría de colegas muy pegaditos y, si se puede, sería fantástico acabar con otro podio”.