La Deportiva de Munitis no supera a la de Herrero

álex estébanez | ponferrada

El cambio de inquilino que se produjo en el banquillo de El Toralín en la jornada 9, con la destitución de Manolo Herrero y la llegada de Pedro Munitis, no ha surtido el efecto deseado en la Deportiva, que no solo no ha mejorado su rendimiento tras la llegada del cántabro, sino que suma un punto menos en las últimas nueve jornadas que en el mismo número de partidos con Herrero al frente.

Con el jiennense en el banquillo, la Ponferradina sumó 14 puntos, con un balance de cuatro victorias, dos empates y tres derrotas, incluyendo los dos primeros partidos de liga, algo que lastró considerablemente el arranque de los bercianos. Además, la eliminación en la Copa del Rey ante un Tercera como el Atlético Cirbonero fue una mancha en el expediente de Herrero, que puso fin a su trayectoria como blanquiazul tras caer ante el Mutilvera en la jornada 9.

En la misma nota que anunciaba el cese de Manolo Herrero como técnico, la Deportiva anunciaba a Pedro Munitis y Gonzalo Colsa como sustitutos. Con la llegada del cántabro, el equipo experimentó una notable reacción que le llevó a ganar tres partidos seguidos ante Racing de Santander, Palencia y Celta B. Ahí se quedó la cosa, puesto que desde la victoria ante el filial celeste el 2 de noviembre la Ponferradina no ha vuelto a ganar, sumando cuatro empates y dos derrotas. En total, 13 puntos en nueve partidos, uno menos que con Herrero.

En el haber de Munitis, no obstante, se debe apuntar la mejora defensiva de la Ponferradina, que sólo ha encajado seis goles en esta etapa, por los once que recibió en el inicio liguero. Sin embargo, la Deportiva de Herrero veía puerta con algo más de facilidad, anotando 10 goles por los seis que ha marcado desde la llegada del técnico cántabro.

Mismo juego

Lo que sí se ha mantenido más o menos igual con uno y otro entrenador ha sido el juego desplegado por el equipo. Antes y ahora, a la Deportiva le está costando un mundo generar ocasiones de gol y más aún transformarlas. Además, el equipo sigue abusando del juego horizontal, con muchos pases lejos de la zona de peligro y poca profundidad para crear peligro ante la meta rival.

Además, tras el empate ante Osasuna B, Munitis insistió en que la ansiedad está haciendo mella en sus jugadores, que a medida que transcurren los minutos acumulan un nerviosismo que les lleva a cometer errores de bulto.

Sea un tema táctico o psicológico, lo cierto es que el entrenador blanquiazul tiene un arduo trabajo por delante para revertir la situación antes de que sea demasiado tarde, y que la Deportiva remonte en la clasificación para acercarse al objetivo único fijado por el club al inicio de la temporada.