Antes de entrar dejen salir
El meta Leandro, los defensas Jorge Cano y César Morgado y el centrocampista Cristóbal no están disfrutando de los minutos deseados La Cultural, en mercado.
Zuiveloon y Antonio Martínez siguen su plan de recuperación en la Aspire Academy. J. CALLADO/ASPIRE
ÁNGEL FRAGUAS | LEÓN
La curiosidad ante la apertura del mercado invernal devora al entorno culturalista. Y si de fichajes se trata, aún más. La exigencia diaria conlleva a que la Cultural se plantee reforzar la plantilla para intentar asegurar esa primera plaza del Grupo I al final de la Liga regular. La fiebre del mercado provocará a buen seguro salidas de jugadores. En plural. En principio, voluntarias. Y si no, forzadas. Pero que parezcan solicitadas por los jugadores que menos han entrado en los esquemas del entrenador Rubén de la Barrera. Lo que la Cultural no quiere es desarmar la armonía que hay en el grupo de jugadores en un vestuario blanco inmaculado. No hay ni un sólo borrón. Aún así, la situación deportiva invita a mover un poco el ‘árbol’. O mejor, agitarlo con suma discreción, algo que parece casi imposible en este club. Nadie quiere desestabilizar, un eufemismo para evitar un verbo mucho más cruel y que se ajusta a la realidad: crispar. Las entradas dependen de las salidas, un terreno siempre pantanoso.
Antes de entrar dejen salir. Así será fácil conocer de qué pie cojea, si es que renquea de alguno, el equipo de Rubén de la Barrera. Es mejor ir de cara y aclarar si el meta Leandro seguirá en la segunda vuelta, si el defensa central Jorge Cano continuará ocupando lugar en el banquillo, si César Morgado no tendrá sitio ni cuando Zuiverloon esté lesionado o si Cristóbal será un complemento más en el centro del campo. Cuestiones delicadas pero que el seno interno deportivo del club necesita plantearse y dar respuesta enseguida. Las heridas cicatrizarán antes. La Cultural está en disposición de subir a Segunda. Hay que aprovechar esta ocasión que no se da desde hace más de cuarenta años. Lo que el club tenga que hacer que lo haga. Rápido. Sin cabrear al vestuario.