FÚTBOL
Batalla cuerpo a cuerpo en el Calderón
El Atlético asegura intensidad y concentración para recibir al renacido Leicester tras la marcha de Ranieri
Jamie Vardy y Antoine Griezmann.
No era la idea principal con la que el Atlético arrancó la temporada, pero hace tiempo que la Liga de Campeones es el gran objetivo del curso para el equipo rojiblanco. No le queda otro título a tiro y aunque hace tres meses costaba trabajo pensar en ello, pese a la manera brillante con la que superó la fase de grupos, ahora, después de haberse reencontrado a sí mismo, de parecerse a la mejor versión ‘cholista’, no suena a ilusión descabellada.
Se respira optimismo en el Calderón ante la visita este miércoles del Leicester, pese a que el campeón inglés tampoco es el mismo que encadenó siete derrotas consecutivas entre enero y febrero, lo que provocó el despido del técnico conductor del milagro de la pasada campaña en la Premier, Claudio Ranieri.
A estas alturas, mes y medio después, su relevo y antes ayudante,Craig Shakespeare, le ha dado la vuelta como un calcetín aunque entre sospechas de que los futbolistas hicieron la cama al italiano. Cinco victorias consecutivas en sus cinco primeros partidos como técnico principal con el mismo esuqleto y maneras muy parecidas a las que les llevaron al título inglés, racha que acabó el fin de semana pasado con la derrota ante el Everton de Koeman.
NO ENCAJAR
Simeone, que no ha podido recuperar a Gameiro pero sí a Gaitán para el banquillo, pondrá en liza al mismo equipo que empató con elMadrid. Con la intención, eso sí, de que el Atlético se muestre más incisivo que el Bernabéu aunque concentrado en no encajar ningún gol. "No me imagino un partido con un resultado grande para ninguno de los dos equipos por las características de ambos, mucho trabajo, intensidad, consistencia en la concentración. Serán dos partidos muy peleados y seguramente se resuelva en su campo", ha dicho el tecnico rojiblanco.
Shakespeare, por su parte, no se conforma con estar en cuartos por primera vez en su historia. "A veces nos pellizcamos para saber si estamos aquí. Son los partidos que siempre hemos soñado jugar. Cuando está aquí sientes un cierto cosquilleo pero para disfrutar de estas experiencias también necesitas un buen resultado", ha señalado el técnico inglés.