Contundencia defensiva

El Atlético Astorga dio ayer un paso de gigante para superar la segunda eliminatoria de la fase de ascenso a Segunda División B. Una férrea defensa bien secundada por el portero fue clave para que el Tropezón no lograra ventaja en el marcador. Después, en una de sus varias llegadas ante la meta contraria, Sergio Conde, el que fuera jugador del equipo maragato, batió a su portero al intentar despejar un centro de Isma, tras una buena subida por su banda. El gol, a falta de quince minutos para la conclusión del primer acto, dio alas a los dirigidos por Miguel Ángel Miñambres que incluso pudieron haber cobrado más ventaja.