Juego directo

P artido en el que se observaron muchas alternancias, tanto en los estilos de juego como en los sistemas utilizados durante el partido. Mantuvo la Cultural el 1-5-4-1 inicial hasta el cambio de Julen por Iván, momento en el que pasó a un 1-4-3-3, y quizás esta alternativa de Rubén de la Barrera favoreció la gestión de la superioridad numérica ante Osasuna, que con múltiples llegadas por fuera buscando acabar las jugadas, bien con tiro o con centros al área, como en el segundo gol, fructificó en la victoria.

Se evidenció durante el partido también, como la Cultural hizo mucho daño cada vez que utilizaba el juego directo, bien por medio las múltiples diagonales de Gianni Zuiverloon sobre el lado débil del rival encontrando a Guarrotxena, o bien sobre los balones directos a Rodri que en varias de estas situaciones como en una disputa con Aridane, pudo hacer gol, a partir de ahí se ganaron segundas jugadas y se llegó mucho por fuera.

Destacó en la Cultural también la rápida incorporación de los exteriores, tras robo al rival en zona interior, teniendo esta acción muy clara tanto Bastos como Víctor. La variante que introdujo el técnico de Iza por dentro no salió bien, aunque es de aplaudir el intento de nuevas alternativas que busquen ir más allá de lo de ‘siempre’.

El Osasuna, por su parte, evidenció ser un equipo que domina las alternativas en el juego, le vimos realizar presión alta, como en la acción del gol. También era capaz de replegarse cuando lo necesitaba, y realizar una intensa presión tras pé?rdida de balón que llegaba incluso a la falta, aunque también evidenció ser un equipo básico, que sufre en las acciones contra sus laterales.

La conclusión del partido a mi criterio es que la Cultural enganchó y fue mejor, cada vez que utilizó las diferentes alternativas de juego directo sobre Osasuna.